Por Carlo Prato
Si tú…
– Aprecias el esfuerzo personal,
– Quieres vivir de tu trabajo,
– Cumples con la Ley, y quieres que todos respeten la Ley,
– Te gusta el orden público para poder vivir tu vida libremente según tus planes,
– Quieres seguridad para ti, tu familia y tus bienes,
– Te metes en sus propios asuntos sin decirle al prójimo cómo vivir su vida,
– Crees que es muy importante la igualdad ante la Ley,
– Eres escéptico respecto de la capacidad de los políticos para arreglar tu vida,
– Sabes bien que los políticos si pueden arruinar tu vida y la de todos, como ha pasado en otras partes,
– Crees que lo importante en una persona es la nobleza de su carácter, la generosidad de su alma y la fortaleza de sus valores, no su sexo, etnia o religión.
– Crees que las personas somos únicos e irrepetibles, y no aceptas que sean considerados peones al servicio de proyectos políticos fracasados que eventualmente darían frutos varias generaciones después,
– Quieres un poder judicial independiente que realmente funcione y proteja nuestros derechos.
– Quieres un banco central autónomo que nos proteja de la inflación, evitando imprimir más billetes para uso de los políticos de turno,
– En salud y educación, más que monopolio estatal, prefieres disponer de los fondos para elegir tú al mejor proveedor,
– Crees que es imprescindible que la Constitución nos proteja del poder de los políticos que controlan el gobierno, porque muchos son corruptos y las mayorías que los eligen, son volátiles y manipulables,
– Crees que los impuestos deben ser justos y proporcionales, y no un castigo al éxito, ni una expresión de envidia, menos un botín codiciado por los políticos que gustan repartir lo ajeno, nunca lo propio.
– Prefieres que el Estado sea un excelente fiscalizador que evite colusiones y abusos, a que sea un pésimo proveedor de bienes de mala calidad,
– Estás cansado de ver cómo el Estado despilfarra y malgasta recursos,
– Crees que la democracia no es perfecta, pero es mejor que todos los demás sistemas y repudias el uso de la violencia en política…
… pero no fuiste a votar, o votaste por alguien de la izquierda que justifica la violencia, o por algún “independiente” de la izquierda violenta, me temo que te equivocaste!
Y no habrías sido el único…
De cada 10 ciudadanos, 6 no fueron a votar…
Y de los 4 que fueron a votar, 2, muchas veces sin saberlo, dieron su voto, o su voto terminó favoreciendo a alguien que justifica o usa la violencia política.
Trabajemos para que las consecuencias de este error no nos sean fatales e irreversibles.
Te invito a que votes por JOSÉ ANTONIO KAST, los Republicanos, queremos hacer un gobierno en donde todos podamos progresar y derrotar ese gran mal que es la pobreza.