- Se destacó el rol de Comité Solar en el desarrollo del hidrógeno verde en Chile.
“El Hidrógeno verde no llegó para competir, sino para acelerar la transición energética de Chile”. Con esta frase, Alonso Céspedes, representante de la Comisión de Ingeniería Química y Biotecnología del Colegio de Ingenieros, comenzó el seminario “El significado del Hidrógeno Verde en Chile”, organizado por el Colegio de Ingenieros.
Con una alta convocatoria, que confirma el interés del hidrógeno verde en la agenda energética del país, expertos de distintas empresas y organizaciones se refirieron al actual escenario de este vector. El seminario, que contó con el patrocinio de la Asociación Chilena de Hidrógeno, el Comité Solar e Innovación Energética de Corfo, la Comisión Nacional de, comenzó con unas palabras de bienvenida de Arturo Gana, Presidente del Colegio de Ingenieros y de Erwin Plett, presidente de la Comisión de Energía de éste.
En la oportunidad se destacó el rol del Comité Solar. «El Comité Solar e Innovación Energética de Corfo, es el ente estatal que empuja el desarrollo del Hidrógeno verde en Chile”, señaló Plett en medio de su presentación.
El seminario, principalmente, se enfocó en temas como la apertura de una nueva economía basada en el hidrógeno verde y la gran oportunidad que tiene Chile para ser uno de los actores más importantes en esta industria. Además, Alonso Céspedes, se refirió a los aspectos claves que debe existir para que la industria se logre desarrollar: legislación apropiada, bajos costos y más información a la sociedad.
Para acercar a los asistentes a la economía del hidrógeno verde, el expositor Rodrigo Vásquez, asesor senior del Programa 4e de GIZ Chile, vice presidente de la Asociación Chilena de Hidrógeno y Secretario de la Comisión de Energía, abordó los aspectos más relevantes y destacó que “Chile tiene las mejores condiciones para producir a gran escala hidrógeno verde a bajo costo gracias a las energías limpias, en especial a la solar”. Agregó que este vector energético, canalizado como combustible, puede alimentar a la industria, transporte y energía doméstica, además de la industria del amoniaco y refinería de metales.
«El Hidrógeno ha estado siempre con nosotros. Estamos volviendo al elemento más básico de la tabla. El Hidrógeno es la base de la vida”, añadió Vásquez.
De acuerdo a los expertos, la llegada de la industria del hidrógeno verde al país, no sólo ayudará a llegar a las metas medio ambientales, como alcanzar la carbono neutralidad al 2050, sino también, Chile contribuiría a que otros países logren bajar sus emisiones.
Para Rosa María Argomedo de HydroTecH2, es muy importante implementar proyectos pilotos con visión y convicción de futuro, algo que esperan lograr con los hidrolizadores de alta eficiencia que están certificando en Europa y que significan un gran avance en innovación para el país. Además, señaló que “en Chile necesitamos proyectos concretos para poder avanzar en regulación y comenzar de una vez».
Para profundizar más en el ámbito legislativo y regulatorio, Karin Von Osten, de H2 Chile, Asociación Chilena de Hidrógeno y miembro de la Comisión de Energía, puso como ejemplo el largo tiempo que toma tener una certificación de la superintendencia de Electricidad y Combustible (SEC). Von Osten se refirió también al marco regulatorio que actualmente existe en Chile para el uso del hidrógeno en instalaciones industriales, pero también advirtió sobre la ausencia de regulación específica para su uso como portador energético renovable.
En la presentación, Karin Von Osten, destacó tres puntos relevantes sobre las implicancias que tiene la falta de regulación, primero la incertidumbre a la hora de evaluar proyectos y para la entrega de permisos sectoriales, además de la dificultad de bancarización y acceso a tasas de interés más atractivas y el temor en la población.
Uno de los puntos importantes en los que coincidieron los expositores del seminario, es la necesidad de potenciar el capital humano en la industria del hidrógeno verde y de mayor capacitación para contar con mano de obra calificada que permita a la industria desarrollarse. Von Osten agregó que un gran desafío para las empresas privadas, es enfocar su interés en las investigaciones que realizan las universidades.
Ignacio Galindo, CEO de ALSET destacó el rol del mercado de motores de combustión interna, una industria con 2,5 trillones de dólares en activos y que tiene como estrategia introducir el hidrógeno como parte de una matriz de combustibles. En particular, el Consorcio Tecnológico, cofinanciado por Corfo, busca desarrollar kits de conversión para los motores de los camiones de extracción de la gran minería, como una tecnología clave para la transición energética. «El 48% del consumo energético en minería es combustible», señaló Galindo, quien agregó que la industria minera cumple un rol muy importante para generar casos de negocios, ya que al usar sistemas multicombustibles, la descarbonización del cobre es más rápida y confiable.
“Chile tiene una oportunidad inigualable de ser autónomo en energía, gracias a las energías renovables (solar, eólica, hídrica, geotérmica, biomasa, undimotriz, maremotriz, entre otras.)”, señaló Erwin Plett, Presidente de la Comisión de Energía del Colegio de Ingenieros. El experto agregó que con los menores costos de electricidad por MWh se abre esta oportunidad. Además, abordó los posibles avances del mercado del Hidrógeno en Chile y en el mundo, donde el país podría ser parte de un negocio de millones de dólares anuales en exportación “no tradicional” de manera sustentable y permanente en el tiempo. “El H2 verde es el link que permitirá llevar a cabo una transición energética sustentable, eficiente y segura. Chile tiene el potencial de jugar un rol fundamental”, finalizó Plett.
Para cerrar el seminario, Hans-Werner Kulenkampff, Presidente de H2 Chile, Asociación Chilena de Hidrógeno, asombró a los presentes con los últimos avances del hidrógeno en Europa al mostrar distintos eventos realizados en torno al H2. «Hay proyectos de billones de dólares en tecnologías de hidrógeno dando vueltas en el mundo”, dijo Kulenkampff, quien se refirió a las favorables condiciones climáticas del país para desarrollar la industria del hidrógeno, pero recalcó que “nosotros tenemos que apuntar, no solamente al Desierto de Atacama, sino que también hay que apuntar a la Patagonia, uno de los mejores potenciales eólicos del mundo”.