En vista de que los clubes del fútbol europeo siguen registrando costos por una pandemia global que ha afectado las finanzas de equipos grandes y chicos, el órgano rector del fútbol de Europa se está preparando para crear un fondo de alivio de hasta 7.000 millones de dólares para ayudar a los equipos en problemas para controlar sus crecientes deudas.
El plan, según varios funcionarios con información sobre las negociaciones, consiste en que el órgano rector, la UEFA, garantice ayuda financiera para equipos que estén cortos de efectivo y jueguen en competencias importantes de clubes europeos. Los reembolsos estarán vinculados con los pagos que reciban en el futuro los equipos por participar en los torneos de la UEFA; para los equipos involucrados en las últimas etapas de la Liga de Campeones, la principal competencia de clubes europeos, esos pagos pueden ser de hasta 100 millones de euros al año (casi 120 millones de dólares).
Durante meses, la UEFA ha estado en conversaciones con bancos y firmas de capital riesgo sobre la creación del fondo. De acuerdo con los funcionarios, los primeros pagos de alivio estarán disponibles para los clubes que califiquen a las tres competencias anuales de clubes en Europa: la Liga de Campeones, la Europa League y la nueva Europa Conference League.
Muchos equipos europeos necesitan con desesperación la ayuda económica. Desde que el coronavirus comenzó a impactar la industria del fútbol a principios de 2020, miles de millones de dólares en ingresos se han esfumado de los balances de los equipos. Clubes de decenas de países se vieron obligados a jugar partidos sin espectadores durante meses y algunos tuvieron que reembolsar dinero a patrocinadores y a las cadenas asociadas que transmiten sus partidos. Muy pocos equipos se han salvado de pasar grandes dificultades.
Por ejemplo, el Barcelona no pudo seguir pagando los servicios de su jugador más famoso, Lionel Messi, debido a una deuda creciente de más de 1500 millones de dólares y, la semana pasada, su presidente anunció que el club calcula que las pérdidas para este año se acercarán a los 570 millones de dólares, una cifra récord para un club de fútbol. Aunque muchos de los problemas financieros del Barcelona son autoinfligidos, resultado de años de mala administración, ahora hay números rojos en la mayoría de los balances europeos. La Liga Premier, la competencia nacional de fútbol con más recursos económicos, sufrió la primera caída en sus ingresos desde su creación en 1992.
La UEFA había estado en conversaciones con Centricus, una firma de inversión con sede en Londres que también estuvo involucrada en conversaciones con la FIFA sobre financiamiento para su ampliada Copa del Mundo, pero a últimas fechas se ha enfocado en cerrar un trato con un grupo de acreditantes que incluye a Citigroup y UniCredit, según personas con conocimiento de las pláticas, quienes se rehusaron a ser identificadas porque las discusiones con los clubes siguen en curso y todavía no se ha llegado a ningún acuerdo.
La UEFA se negó a hacer comentarios sobre las pláticas o el fondo de alivio. Sin embargo, le ha mencionado la propuesta a la Asociación de Clubes Europeos (ECA, por su sigla en inglés), un organismo coordinador que representa a unos 200 equipos de primeras divisiones de Europa.
La UEFA le pidió a la ECA que investigue la situación de sus miembros para conocer sus necesidades económicas. La principal inquietud está relacionada con las decenas de millones de dólares de deuda por las transacciones de jugadores. Estas obligaciones, acumuladas durante varios años mientras los equipos se compraban y vendían futbolistas entre ellos, son una fuente vital de ingresos para los clubes de tamaño mediano y pequeño. No obstante, cualquier incumplimiento podría desencadenar un efecto de contagio debido a lo interconectadas que están las deudas de los clubes.
El mercado de transferencias de jugadores —con un valor de 7.000 millones de dólares antes de la pandemia— ahora se ha ralentizado de manera considerable, con más vendedores que compradores y clubes que no han podido deshacerse de jugadores que ya no pueden costear. El director ejecutivo de uno de los clubes más grandes de Italia comentó que hay escasez en el mercado para jugadores de nivel medio, aquellos con un valor de entre 5 y 30 millones de dólares, transacciones que lubrican el mercado en los tiempos de bonanza. En cambio, los equipos cada vez dependen más de préstamos y transferencias gratuitas para descargar los contratos y los salarios que ya no pueden pagar.
Según una de las personas familiarizadas con las conversaciones, la participación de la UEFA en el fondo de alivio es crucial, pues permitirá que los bancos aseguren su inversión con los ingresos futuros de las competencias, en vez de con los balances de cada uno de los equipos. Ese acuerdo reduciría el riesgo para los acreditantes y al mismo tiempo garantizaría tasas de interés menores de lo usual para los clubes. Para determinar las cantidades que pueden recibir los clubes, la UEFA establecerá un perfil de categorías para los equipos con base en los ingresos que probablemente obtendrán por su participación en la Liga de Campeones, la Europe League y la Conference League, una competencia de tercer nivel que se lanzará esta temporada.