Los familiares proporcionaron como prueba varias imágenes del cuerpo, pero los insurgentes se desmarcan.
Según testigos, tres hombres armados llegaron a la casa y la registraron, antes de atar a los miembros de la familia. Hablaban en árabe, y golpearon y mataron a tiros a Negar frente a su esposo e hijos, tal y como recoge BBC. Los familiares proporcionaron imágenes que mostraban sangre salpicada en una pared en la esquina de la habitación. También fotografías sobre el cuerpo, con el rostro muy desfigurado.
El pasado sábado, los talibanes disolvieron una manifestación de mujeres con tiros al aire y gases lacrimógenos. Los grupos de derechos humanos han estado informando sobre asesinatos, detenciones y persecuciones de minorías religiosas, así como represión ante las mujeres. La educación femenina fue prohibida en el anterior régimen talibán, aunque ahora, aseguran los insurgentes, se respetarán sus derechos “siguiendo la ley sharía”.
