El alemán Alexander Zverev, tercero en el ranking mundial, que fue derrotado este domingo en octavos de final del Australian Open por el canadiense Denis Shapovalov, 14º de la ATP, por 6-3, 7-6 (5) y 6-3. Tras la derrota, realizó una feroz autocrítica y reconoció, decepcionado: “No merezco ser el número uno”.
”Llegué (a Australia) con el objetivo de ganar el torneo y convertirme eventualmente en el número uno mundial. Pero si juego así, no lo merezco. Es tan simple como eso ”, estimó unos minutos después de perder ante Shapovalov, que será el rival del español Rafael Nadal en cuartos de final.
Ante la pregunta de si el puesto de número uno mundial forma parte de sus objetivos de la temporada, el alemán ahondó en su decepción. ”Tras un partido así, pienso que es de locos hablar de ello. Primero me tengo que recuperar de esto”, respondió.
”No es culpa de nadie, solo de mí. Ni del técnico, ni de mi equipo, ni de ninguna otra persona. Al final de todo, como número tres mundial, debo asumir mis responsabilidades sobre lo que hago. Lo que hice hoy no fue lo suficientemente bueno para ganar a alguien como Denis”, concluyó. El alemán había alcanzado las semifinales en Melbourne en 2020 y los cuartos el año pasado.
Por su parte, el canadiense, semifinalista del pasado Wimbledon, que es su mejor resultado en un Grand Slam hasta ahora, nunca había superado la tercera ronda en Melbourne. ”Jugué de forma inteligente el partido, que se puso a mi favor rápidamente, y después perdí un poco el control del encuentro. Pero supe luchar para seguir controlando el juego”, comentó el canadiense de 22 años.
Contra Zverev, que es el primer tenista al que ha ganado en tres sets desde el inicio del torneo, el canadiense jugó de forma espectacular. En la primera ronda, había derrotado al serbio Laslo Djere en cuatros sets, después al surcoreano Soonwoo Kwon en cinco, antes de batir al estadounidense Reilly Opelka en cuatro.
Fuente: LA NACIÓN