La Policía de St. Petersburg, en la costa oeste de Florida, presentó a su nuevo refuerzo, Spot, un perro robótico a control remoto que se utilizará en casos en los que sea necesario enviar a los agentes locales de las fuerzas especiales (SWAT).
Para evitar posible rechazo de la ciudadanía ante la llegada de este robot, la Policía destacó que solo se utilizará en “situaciones extraordinarias” que implican una amenaza para la vida humana y/o riesgo para los equipos de primeros auxilios y fuerzas del orden.
Es decir, para responder a un caso donde haya una persona armada, toma de rehenes, búsqueda y rescate de víctimas en un edificio inestable, en situaciones de exposición a peligros biológicos o químicos, desastres naturales o grandes sucesos con numerosas víctimas, explicó la Policía.
Este robot de la empresa Boston Dynamics puede subir escaleras, abrir picaportes y moverse por terrenos desiguales, informaron en un comunicado.
Spot, que se sumó al equipo de agentes del departamento gracias a la donación de un matrimonio de la ciudad, dispone de una cámara y un intercomunicador que permite a su operador hablar y escuchar a, por ejemplo, un “sospechoso atrincherado en un edificio o que tiene rehenes”.
Para atajar las reticencias de la comunidad, la Policía detalló además que el perro no tiene boca, por lo que no puede morder, ni puede portar armas ni nada que pueda dañar a personas o animales.
Además, no será utilizado en casos de control de multitudes, paradas de tránsito, situaciones rutinarias o para “intimidar o coaccionar” a una persona que no esté involucrada en un “incidente de alto riesgo”.
La incorporación de Spot a esta policía floridana se produce días después de que se supiera que el Gobierno de EEUU está desarrollando otros “perros robot” para apoyar a los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) en la vigilancia de frontera con México, lo que ha desatado una ola de críticas por parte de activistas.
Similar oposición recibió el año pasado la firma de un contrato entre Boston Dynamics y la Policía de la ciudad de Nueva York, que al final se vieron obligados a romper el acuerdo por 94.000 dólares, según reportaron medios locales.
Las críticas no impidieron que la policía estatal de Massachusetts fuese la primera del país en probar otro ejemplar de Spot en 2019
FUENTE: EL NUEVO HERALD