Tras el conteo del 67% de las mesas escrutadas, Petro acumulaba una clara ventaja contra sus principales contrincantes, acumulando el 41% de los votos, seguido por Hernández con el 28% y Gutiérrez con el 24%. Los números, sin embargo, podrían variar ligeramente con el correr de las próximas horas en la medida que las autoridades electorales avancen con el proceso de contar los votos.
El ex alcalde de Bucaramanga había mostrado un fuerte avance en las encuestas en días previos a los comicios, pero la mayoría de los expertos preveían que no lograra superar a Gutiérrez.
Más de 39 millones de colombianos estaban registrados para votar en unos comicios marcados por la polarización y un amplio deseo de la población de ver cambios en la conducción del país.
Según las últimas encuestas, más del 75% de la población cree que Colombia marcha por mal camino, mientras que sólo un 27% ve con buenos ojos la gestión del presidente Iván Duque.
Aunque aún quedan tres semanas, las encuestas también pronostican que Petro cuenta con las mayores probabilidades de ganar la contienda.
Hernández y Petro lanzaron sus campañas hablando a favor del cambio, pero el ex guerrillero el que es visto por la mayoría como el que más garantiza el fin del estatus quo.
De ganar la elección de junio, Petro se convertiría en el primer presidente izquierdista de Colombia, país que atravesó por un conflicto armado entre el gobierno y los movimientos guerrilleros que duró décadas y ha dejado más de 220,000 muertos.
El propio Petro es un ex integrante del M-19 que estuvo preso durante su juventud por posesión de armas y rebelión antes de salir libre con la desmovilización del movimiento guerrillero y comenzar a competir por el poder a través de los votos.
El ex guerrillero ha competido en tres elecciones presidenciales denunciando que los sectores que han gobernando a Colombia por décadas han abandonado a los sectores más vulnerables. Ese mensaje no había logrado cuajar en sus primeros dos intentos, pero parece haber encontrado su momento en la actual contienda.
Esas declaraciones aunadas a su pasado guerrillero generan gran inquietud entre sus críticos, quienes le acusan de ser demasiado radical y lo comparan con el fallecido presidente Hugo Chávez cuando ganó la presidencia de Venezuela en 1999 para luego reemplazar el sistema democrático del país por una dictadura socialista.
“Petro es una amenaza para la democracia colombiana, para sus instituciones y para la tranquilidad del país”, dijo desde Miami el activista Fabio Andrade.
Pero otros creen que Petro no podrá seguir los pasos de Chávez desde la presidencia de Colombia. Primero, porque las circunstancias no son iguales entre los dos países y segundo porque el candidato izquierdista gobernaría bajo una fuerte oposición que le obligaría pasar sus cuatro años de gobierno brindando concesiones a las fuerzas armadas y las instituciones del país para poder gobernar.
Además de los temores sobre Petro, algunos electores también expresaron preocupación sobre la transparencia de los comicios.
“Espero que el resultado refleje lo que el pueblo colombiano quiere”, dijo Juan Sebastián Naranjo desde Miami. “Es difícil confiar en este momento en las instituciones, en los organismos de control, particularmente, y lo que espero es que estas votaciones sean transparentes”, agregó.
La confianza de los colombianos en el sistema electoral se vio golpeada tras la controversia que hubo en las elecciones legislativas del pasado 13 de marzo, en la que aparecieron más de un millón de votos a los que ya se habían registrado en el preconteo.
Aunque las discrepancias con los resultados finales son usuales, esa vez la magnitud de la diferencia fue mayor, lo que generó cuestionamientos en el sistema electoral y preocupación sobre los comicios presidenciales.
Fuente: EL NUEVO HERALD