- No creer todo lo que te cuentan es un dicho popular, pero ¿qué pasa cuando esto lo ves en una web que frecuentas o lo compartió tu mejor amigo? El chequeo de información se ha vuelto una necesidad y hay formas de realizarlo correctamente.
En 2020, pocos meses después de la llegada del coronavirus, un estudio de la Universidad Católica reveló las «fake news» o noticias falsas más creídas por los chilenos en ese momento. Según la investigación, un 46% de las personas creyó en el cierre del tradicional restaurante de Valparaíso Cinzano producto de la crisis, mientras que un 33% dijo haber pensado que era verdad que el COVID-19 fue creado en un laboratorio.
Entre las otras «fake news» que circularon estaba que las redes 5G de telefonía móvil propagaban el virus, que hacer gárgaras con agua y sal lo prevenía y que el Hospital San José tuvo que disponer cadáveres en los pasillos debido al colapso. Acercándose el invierno se creía que el Sol y las altas temperaturas «matan» el virus, lo que una nueva ola de COVID-19 en pleno verano descartó.
Pero, ¿somos los lectores tan ilusos? Es lo que muchos pensarían. Pero a favor del lector, hay una responsabilidad de quienes están recabando, chequeado y distribuyendo la información. Aunque no siempre se realiza el proceso a cabalidad. Los medios tradicionales como los periódicos o las radios tienen un estricto protocolo de verificación de la información, mientras que en el mundo digital muchas veces gana el “golpe”, el “clic”, sin tener verificación real de las noticias. Más aún, cuando esta ya se difunde y se publica en redes sociales, quien va en el Metro leyendo desde su celular tiende a creer e informarse si se trata de un familiar o amigo quien replica la información. Pero, lamentablemente, es como el juego del teléfono, donde crece y crece la “fake news”.
“En el caso de Las Últimas Noticias, hacemos una exhaustiva búsqueda y verificación de las fuentes de la información antes de publicar las noticias, ya que de lo contrario más que informar, estaríamos desinformando. Las “fake news” tienen consecuencias como generar temor en la población, pánico, ignorancia, irresponsabilidad. Las noticias son capaces de generar actitudes y acciones en la población en su toma de decisiones. Entonces si estás informando algo incorrecto como medio de comunicación, puedes generar una fallida toma de decisiones por parte del consumidor de esta información”, dice Alejandro Arze, gerente general de LUN (https://www.lun.com/).
Entonces, como lector ¿cómo podemos identificar las fake news? En un mundo hiperconectado, podemos también usar las redes sociales a favor, siendo una herramienta para verificar la información. Asimismo, cuando se trate de información pública, se puede chequear directamente con sitios gubernamentales.
Este “chequeo de datos” ha llegado a ser una necesidad en la actualidad. Un ejemplo es el sitio Factchecking.cl, al alero de la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Católica, el que nació para dar rapidez y confiabilidad al ejercicio de verificación. No tiene fines de lucro ni recibe financiamiento, al desarrollarse dentro de una cátedra de Periodismo, que se imparte dos veces al año, informan en su sitio web https://factchecking.cl/. Como parte de sus trabajos, han confirmado o desestimado información dada a conocer por las autoridades, por ejemplo en la última Cuenta Pública del Presidente Gabriel Boric o en medio del Plebiscito y las elecciones.