Por todos los medios se comentó que, tras el desarrollo del plebiscito de salida de la Nueva Constitución, el Presidente Gabriel Boric procedería a diseñar un nuevo gabinete para esta segunda fase de su gobierno, fuese cual fuese el resultado. Sin embargo, a la luz de la aplastante y categórica derrota sufrida como abanderado de la opción Apruebo, según sus críticos, el panorama es otro, la realidad es distinta y, por ende, las exigencias y compromisos políticos y sociales también cambiaron radicalmente.
Y, diciendo las cosas por su nombre, al actual gobierno le conviene apurar este cambio ministerial, porque en gran manera trasladaría la agenda a este nuevo tema, dejando atrás las portadas y editoriales de los medios de comunicación que continúan analizando las causas de la gran debacle sufrida el domingo pasado por el apruebo, el Gobierno y los partidos que lo sustentan.
En este contexto, se comenta que este cambio se realizaría hoy martes, como una forma de responder a la exigencia del conglomerado triunfante, en cuanto que para asistir a La Moneda a conversar sobre lo que viene, ellos necesitan que primeramente el Presidente ordene la casa, lo que equivale a que defina rápidamente este nuevo gabinete, “porque necesitamos saber con claridad quiénes serán nuestros interlocutores válidos”, dijeron el lunes algunas fuentes opositoras.
Al respecto, se ha especulado que al margen del titular de la Segpres, Giorgio Jackson, y su par del Interior, Izkia Siches, serían cinco más los cambios y enroques -llamados también “sillas musicales”- los que habría dentro del equipo ministerial. En La Moneda existen varios ministros mal evaluados, como, los de Energía (Claudio Huepe), Ciencia (Flavio Salazar), Minería (Marcela Hernando), Salud (Begoña Yarza), Medioambiente (Maisa Rojas) y Cultura (Julieta Brodsky).
De partida, la carta que más ha sonado, tanto oficial como extraoficialmente, para sumarse al nuevo gabinete es la ex alcaldesa Carolina Tohá, con quien Boric se contactó antes del plebiscito, donde habrían abordado su posible ingreso al gabinete. Uno que podría cambiar su oficina de la Alameda al Palacio de La Moneda es el actual ministro de la Vivienda (PS), Carlos Montes, quien podría pasar a ocupar el puesto de Giorgio Jackson. También se especula que la canciller Antonia Urrejola dejaría el cargo en manos del embajador de Chile en Washington, Juan Gabriel Valdés, un hombre de peso político y con reconocida trayectoria en el ámbito de las relaciones internacionales. También apareció el nombre de la presidenta del PPD, Natalia Piergentili, como candidata a asumir la cartera de Desarrollo Social, cargo que ocupaba la militante de ese partido, Jeanette Vega, renunciada tras el caso Llaitul.
Fuera del círculo de hierro del Presidente Boric, en los partidos despierta especial interés la evaluación de las carteras más sectoriales. Acorde al último sondeo de Pulso Ciudadano que midió evaluación y conocimiento en particular de los 24 ministros (junio 2022), el gabinete en su conjunto cuenta con un 27,1% de aprobación y un 57,2% de desaprobación, con 16 ministros con un conocimiento por debajo al 40% de los consultados.
“Corregir el rumbo” y “pulir equipos para la nueva etapa” son los conceptos que asoman en ambas coaliciones oficialistas cuando se habla de cambio de gabinete.
“No vamos a ser nosotros los que elijamos un ministerio, porque el Presidente es el que define sus necesidades, pero tiene la garantía de que que ha habido buen desempeño del ministro de Hacienda, de Defensa, de Vivienda, el subsecretario del Interior, que son ejemplos de los que están en los primeros lugares de atributos. Cualquiera de ellos, u otros, tienen posibilidades, pero va a depender de las necesidades de La Moneda”, expresó el senador del PPD Juan Luis Castro.
