Una pasantía en la Universidad de Nottingham, en Reino Unido, será el premio que reciba el equipo que logre el primer lugar en el Desafío NetZero 2030.
Con la invitación a imaginar el futuro que queremos construir, se realizó el webinar de lanzamiento del Desafío NetZero 2030, concurso que invita a estudiantes de pregrado de arquitectura y carreras de la construcción a diseñar un proyecto de vivienda social sustentable y que aborde los Objetivos de Desarrollo Sostenible de cara al 2030.
Este llamado, liderado por Construye2025 y el Colegio de Arquitectos de Chile, y en el que participaron autoridades de gobierno, junto con representantes de la industria y el mundo académico, busca que estudiantes de todo el país desarrollen, a través de un diseño integrado, una solución habitacional innovadora, que incluya el consumo neto de energía, emisiones netas de CO2, la economía circular y la industrialización como sus pilares fundamentales.
“Más que un concurso, esto es un desafío a los estudiantes y profesionales del sector a aportar no sólo a la crisis climática que enfrentamos, sino que también a la emergencia habitacional que vivimos. Mejorar los prototipos de vivienda social, en base a estos cuatro pilares, nos permitirá avanzar en los objetivos de desarrollo sostenible, comprometidos por el Estado, y a mejorar la calidad de vida de nuestros habitantes”, sostuvo Marcos Brito, gerente de Construye2025, programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción.
Cabe señalar que hoy 1 de cada 10 personas necesitan de una vivienda, calculando el déficit en más de 650 mil a nivel nacional, junto a nuevas exigencias que desafían a diseñar con nuevos y mejores estándares de sustentabilidad y habitabilidad, “por lo que es indispensable vincular a las autoridades, la industria, los gremios, pero -por sobre todo- a los profesionales que tendrán a cargo el desarrollo futuro”, añadió.
Brito, junto con Natalie Mollenhauer, arquitecta y directora del concurso, dieron a conocer las bases técnicas y administrativas, además de los premios que recibirán los equipos ganadores, que incluyen una pasantía en la Universidad de Nottingham en el Reino Unido. “Creemos que es un aporte para los futuros profesionales y sus profesores que desarrollen proyectos de este tipo, con una metodología que se ajusta a cómo se trabaja en el campo laboral diario, en zonas específicas del país, y que tengan la posibilidad de conocer experiencias internacionales y presentar el proyecto ganador en el extranjero. En esta oportunidad, será Guillermo Guzmán, destacado arquitecto, profesor de la universidad de Nottingham, quien los reciba y los oriente en esta pasantía”, enfatizó Mollenhauer.
Guzmán -radicado por más de 20 años y académico de esta universidad- realizó una charla magistral, en la que destacó este tipo de iniciativas, “sobre todo cuando las autoridades, gremios, industrias y la sociedad civil se unen, ya que otorgan garantías de viabilidad de los proyectos. De verdad, para un joven que estudie arquitectura, imaginar y diseñar dónde podrían vivir las familias chilenas en un mediano plazo debe ser un sueño”.
Asimismo, hizo hincapié en que la industria no puede seguir viendo la lucha contra el cambio climático, a través de la carbono neutralidad o la economía circular, en el minimizar o disminuir la calidad de las construcciones, “esto es un llamado a optimizar todos los recursos, como parte del desafío que tenemos como sociedad”, sentenció.
Por último, destacó el diseño colaborativo que incluye este concurso, con la conformación de equipos que incluyan profesionales, estudiantes de arquitectos y otros de la construcción desde el diseño del proyecto. De acuerdo al académico, esto permite obtener soluciones integrales, sin tener que corregir errores en la marcha y minimizando fallos en el proceso. “La vivienda debe verse como un sistema, con una visión de la sociedad inclusiva, donde el confort y la calidad de vida de sus habitantes sean parte de sus derechos fundamentales”, concluyó.
Así, el llamado de los organizadores es a atreverse y que estudiantes y universidades se sumen a este desafío. “Los equipos recibirán charlas y capacitaciones que los ayuden a lograr proyectos innovadores, pero también viables. Este será un proceso de colaboración, aprendizaje, integración y aporte al desarrollo social del país”, sostuvo Paola Molina, representante del Colegio de Arquitectos de Chile, presidenta de CES y del Comité de Economía Circular del Instituto de la Construcción, al finalizar el evento.
Luego de este lanzamiento, los estudiantes que quieran participar podrán inscribirse, contando con el patrocinio de su universidad, CFT o IP, en el sitio web del Desafío hasta marzo de 2023, para la preparación del anteproyecto que deberá ser presentado en junio. Sólo cinco equipos pasarán a la segunda etapa, donde en conjunto con alguna oficina de arquitectura o construcción patrocinante, deberán desarrollar el proyecto a presentar en noviembre cuando se realice la premiación.
Para más información, revisa https://desafionetzero2030.cl/# y síguelos en redes sociales.