Se localiza en bóveda número 127 del cementerio municipal de La Serena. Después de más de cien años, será posible poner una placa y flores.
La escritora Alicia Mondaca acompañada por los funcionarios del Cementerio Municipal Gabriel González Videla: Valentina Araos Carrizo, Melissa Rubilar Castillo, Mario Pinto Godoy y Víctor Galleguillos Díaz, colaboraron diligentemente en la búsqueda de la tumba del insigne escritor de La Serena, Manuel Concha Gajardo.
Desde hace mucho tiempo existía la inquietud acerca del lugar de Cementerio Municipal de La Serena donde se encontrarían sus restos mortales, como se presumía y decían algunas publicaciones de esa época.
La Sociedad Patrimonial Pedro Pablo Muñoz Godoy había publicado algunas de sus obras; como, también, había buscado su tumba sin dar con ella.
La investigadora Susana Pacheco procuró encontrarla y dio las bases para el hallazgo, encontrando en archivos del Cementerio Municipal Gabriel González Videla, que fue enterrado en sepultura de Doña Isidora Aguirre Viuda de Munizaga, quien fue medio hermana de Manuel Concha Gajardo. Este dato fue publicado en el Libro: Crónicas de La Serena, pág. 48 (Ediciones Volantines, 2010). Sin embargo, en esa ocasión la tumba no fue encontrada.
Ahora, en una investigación llevada por la escritora Alicia Mondaca, se llegó a determinar que Manuel Concha Gajardo (1891) efectivamente está sepultado en una bóveda familiar junto a Isidora Aguirre Munizaga (1894), correspondiente a Juan Miguel Munizaga Trujillo (1846) quien fue su esposo. Este dato fue clave y terminó confirmando que era el sitio correcto. Ella fue una mujer prominente de la época; su nombre antes de las nupcias fue Isidora Aguirre Gajardo, teniendo con Manuel en común a su madre Doña Candelaria Gajardo Munizaga, y siendo viuda hizo un contundente aporte económico a la Revolución de 1851, llamado el “Sitio de La Serena”.
Manuel Concha Gajardo escritor revolucionario y por excelencia el mayor cronista del siglo XIX de la segunda ciudad más antigua de Chile. Nació en La Serena en 1834. Dos de sus grandes obras son: Crónica de La Serena desde su fundación hasta nuestros días 1549-1870. Fue escrita tras una extensa y acuciosa investigación, y que es publicada en 1871. En su página de “advertencias preliminares” recalca: “Nuestro trabajo quedará recompensado si merece la aprobación del pueblo de La Serena, para el que está especialmente escrito”. El libro: Tradiciones serenenses, recoge rasgos y costumbres de la sociedad de la época con exquisito lenguaje. Fundador del periodismo en nuestra ciudad; publicó en periódicos como el Eco Literario del Norte (1857). Amplia y admirable es su obra literaria; escribió obras de teatro, drama histórico y social, cuentos, novelas, artículos periodísticos, tradiciones populares. A través de sus relatos podemos seguir el diario acontecer de la Revolución Constituyente y del Ejército Libertador del Norte, por medio del diario El Cosmopolita, en la imprenta que llevó el mismo nombre, siendo esta, de su propiedad.
Por sobre lo anteriormente mencionado, está el aporte basal de su obra; ya que edifica identidad: recoge las particularidades del diario vivir de la época, para conformar la esencia del ser serenense, de la Región, del norte chileno, es decir construye patrimonio. Manuel Concha: hombre de letras, sensible, incansable, de aguda mirada, no gozó de abundancia económica en su vida, pero estaba destinado a ser imperecedero por su legado.
Manuel Concha Gajardo es indudablemente Ilustre personaje de nuestra historia. Tal es el impacto e importancia de su obra, que La Serena le debe un gran homenaje. Como Sociedad Patrimonial soñamos y deseamos que los ciudadanos transitemos un día por una calle importante de la ciudad que lleve su nombre ¡Esa es una deuda!
Arturo Volantines señala, también, en la edición de Crónica de La Serena publicada por la Sociedad Patrimonial Pedro Pablo Muñoz Godoy: “El énfasis, también, está en la luminosidad de la obra; busca que la obra hable desde la obra, porque posee del ser de la segunda ciudad de Chile (1544) y de la nobleza de su gente: constructora de tradición heroica y libertaria, indomable. No se sorprenda: este no es un libro, es semilla”.
El diario El Progreso de La Serena (mayo de 1891) manifestaba respecto de la muerte de Manuel Concha: “Este distinguido escritor nacional, que fue el fundador del periodismo en La Serena, en las condiciones que reclamaban entonces el progreso social y la cultura de nuestra provincia, ha dejado de existir ayer, en medio del dolor profundo de su honorable familia y sus numerosos amigos./A su mérito de eximio escritor, el señor Concha unía las nobles prendas del carácter y del corazón, que le hacían querer de cuantos le trataban. Sabía siempre corresponder al cariño profundo de sus amigos, con esas afecciones del alma que son el imán de los corazones./ Con el literato era ameno y profundo a la vez, con el político descollaban su tolerancia amistosa, y patriota como pocos, de raza esclarecida, era su culto la patria, después de Dios./ El Correo de Ultramar, La Época de Madrid. La Tribuna de Buenos Aires, El correo de Perú, y otros diarios de gran prestigio en América, reproducían siempre sus hermosos trabajos literarios con entusiastas elogios./ El buen ciudadano, el escritor de talento privilegiado, el dignísimo padre de familia habrá recibido ya la mirada misericordiosa del Supremo Juez Honrada sea siempre su memoria por cuanto saben estimar los bellos dones del alma y de la inteligencia que irradiaron siempre de una manera luminosa en esa vida y en esas obras”.
rr.pp.: s.p.p.m.g.
