Puntos destacados:
- Se reavivan los temores inflacionarios en EE.UU. El IPC de marzo fue mayor a lo esperado, impulsando al índice total de 3,2% a 3,5%. Más aún, el componente subyacente también reflejó inercia. En tanto, la Fed ha mantenido una postura cauta. En reacción, las expectativas se moderaron todavía más, postergando el inicio más probable de recortes de tasas desde junio a septiembre e internalizando cerca de dos rebajas de tasas este año.
- Mercados internacionales detienen el optimismo. Tras la sorpresa inflacionaria y en una lectura más hawkish para la política monetaria, el dólar global superó los 105 puntos por primera vez desde noviembre, las tasas de interés de largo plazo en las principales economías repuntaron de manera generalizada y los índices bursátiles detuvieron los avances de los últimos meses.
- En Chile, la actividad confirmó un positivo inicio de año con una nueva expansión en febrero (4,5% a/a). Esto se da con un avance en el margen de todos los sectores. Existen diversos elementos para estimar que la economía no podrá sostener este dinamismo, desacelerándose hacia delante. No obstante, ante las sorpresas al alza en estos primeros meses elevamos nuestra proyección de crecimiento para el PIB de este año hasta 2,8% (2,25% previo).
- Mercado laboral avanza, aunque aún existen signos de preocupación. La creación de empleos se mantiene por sobre sus patrones estacionales habituales, especialmente asociado a empleo asalariado privado, pero indicadores de demanda permanecen castigados dando una nota de cautela.
- IPC de marzo sorprendió a la baja (0,4% vs. 0,6% esperado). Al igual que en el mes previo, el aumento de precios estuvo concentrado en productos puntuales y reflejó un limitado traspaso cambiario. Con todo, anticipamos nuevas alzas de los registros inflacionarios en los próximos meses, que llevarán a un cierre de año en 3,7%, superior a nuestra estimación previa.
- Los activos locales reaccionan ante nuevo contexto económico. El tipo de cambio experimentó una importante apreciación tras la recuperación del precio del cobre y un tono más cauto en la conducción monetaria local. En el escenario base, estimamos que la paridad seguirá convergiendo hacia niveles más cercanos a sus valores de equilibrio hacia el cierre del año ($890).
- BCCh moderó el ritmo de ajuste en la TPM en su reunión de abril. En línea con lo esperado y con un tono más cauto, el Consejo optó por reducir la tasa de referencia en 75 pb (hasta 6,5%). Existe espacio para continuar con recortes de tasas durante el año: la demanda interna sigue frágil y las perspectivas inflacionarias a dos años están ancladas. Así, estimamos que la TPM cerrará el año en torno a 4,5%.