- Hoy, Hemme tiene 64 años y sus abogados dicen que cumplió la condena más injusta y más larga conocida contra una mujer en la historia de Estados Unidos
Es justamente lo que le ha sucedido a Sandra Hemme, que ha sido liberada de prisión recientemente por un asesinato que no cometió, pero por el que fue condenada a cadena perpetua en 1980. La estadounidense, supuestamente, acabó con la vida de una trabajadora de la biblioteca Patricia Jeschke de St. Joseph (Missouri).
Un hecho que jamás se produjo, principalmente porque no había ningún tipo de relación entre ambas personas. Sin embargo, el problema fue que Hemme confesó el crimen en un hospital psiquiátrico, en que el consumo excesivo de potentes sedantes se considera la razón principal de este fallo.
Después de 43 años, Sandra Hemme ha salido recientemente de prisión en lo que se considera la condena injusta más larga de la historia del país norteamericano. El juez Horsman fue el encargado de redactar un texto de 118 páginas en las que desarrolla el porqué de su justa liberación.
«Este tribunal considera que la totalidad de las pruebas apoya la declaración de inocencia real», confirmó el letrado, en un caso que se seguirá revisando, a pesar de que la mujer fue puesta en libertad el pasado 14 de julio. Según se confirmó en sede judicial, existen «pruebas claras» para defender la inocencia.
Dentro de las explicaciones que dio Horsman, a pesar de esas confusas palabras de Sandra Hemme debido a la medicación, queda claro que no había móvil ni testigos que relacionan a la supuesta asesina con la víctima. Por lo tanto, el asunto parece totalmente zanjado.
Después de 43 años en prisión, Sandra Hemme se reencontró con su familia. En un parque cercano a prisión, la mujer se abrazó con su hermana, su hija y su nieta. Según han confirmado algunos medios estadounidenses, la presa vivirá a partir de ahora con su hermana. La visita a su padre, que se encuentra hospitalizado en cuidados paliativos, se producirá en los próximos días.
Fuente: rrss