Morosidad de personas mayores crece ante imposibilidad de acceder a empleos formales

  • Las personas mayores son el grupo que más ha aumentado la morosidad. Su endeudamiento está asociada a la necesidad de financiar sus gastos básicos y también de salud.
  • Uno de los segmentos más vulnerables son las mujeres de la tercera edad dedicadas a cuidar a familiares, ya que suelen caer en el endeudamiento informal.

La falta de oportunidades para acceder a empleos formales está afectando la situación financiera de las personas mayores, que en el último tiempo han visto aumentados sus niveles de morosidad. Así lo indica, Mario Espinosa, director legal de GrupoDefensa.cl, quien explica que “uno de los principales factores del endeudamiento de estas personas es la informalidad laboral, a la cual deben recurrir porque, en general, están cerradas las opciones más formales y estables, sobre todo para las mujeres”.

Según el Boletín de Informalidad Laboral del INE, a junio de 2024, en los últimos doce meses las personas trabajadoras por cuenta propia informales se expandieron en un 10,1%, incididas tanto por hombres (9,2%) como por mujeres (11,3%), la que fue influida principalmente por el tramo etario de entre 55 y 64 años (13,2%). Dada esta situación, según Mario Espinosa, es común ver a personas mayores en situaciones de precariedad, que se ven obligadas a aceptar trabajos informales o temporales, sin contratos que les garanticen estabilidad o acceso a beneficios sociales.

De hecho, el aumento de la morosidad de ese segmento de la población es una realidad que da cuenta el último informe de Equifax y la Universidad San Sebastián.  En los últimos 12 meses, la población adulta mayor aumentó significativamente su tasa de morosidad: en el tramo de personas de 60 a 69 años creció un un 5,7%, mientras que en los adultos mayores de 70 años o más el incremento fue del 15,4%, el más alto del estudio.

Al analizar las causas del endeudamiento de las personas mayores el abogado Espinosa sostiene que la mayoría de los créditos se destinan a gastos de salud y alimentos, a diferencia de los grupos más jóvenes que suelen endeudarse para bienes de consumo. «Esto, sumado a las pensiones insuficientes, hace que muchos adultos mayores recurran a créditos para vivir día a día, pagar los servicios básicos, comer e incluso abrigarse en invierno, lo que los lleva rápidamente a caer en mora. Además, la falta de educación financiera y el sobreendeudamiento previo dificultan que puedan salir de esta situación», agrega el abogado.

Cuidadoras: uno de los grupos más propensos al endeudamiento

Uno de los segmentos más vulnerables son las personas cuidadoras, una realidad que Aurora Ubeira (79), fundadora de la agrupación «Amigos y Cuidadores de Postrados de El Quisco» y finalista de Nuevos Héroes 2021, conoce de cerca. «Muchas veces, son las propias personas mayores, generalmente mujeres, quienes asumen el rol de cuidar a familiares, lo que les impide buscar empleos formales o generar ingresos suficientes. Cuando fallece el postrado, incluso, muchas personas quedan a la deriva, es decir, sin ocupación ni ingresos», explica.

«Además, los altos costos asociados al cuidado de personas dependientes, como medicamentos, insumos médicos y atención especializada, suelen ser asumidos por las cuidadoras. Ante la falta de recursos, recurren a bingos, colectas y al endeudamiento, lo que agrava una situación financiera que casi siempre era frágil desde antes», cuenta Ubeira.

En este contexto, el endeudamiento informal es un riesgo latente para este grupo. «Muchas veces recurren a préstamos informales o a prestamistas que ofrecen condiciones extremadamente desfavorables. Dadas las circunstancias, no es extraño que acepten créditos de alto costo o incluso caigan en redes de usura. Esta situación las atrapa en un ciclo de deuda aún más difícil de romper, sin ningún tipo de protección legal, lo que agrava su vulnerabilidad económica y emocional», concluye Mario Espinosa.

¿Cómo evitar el endeudamiento?

El director legal de GrupoDefensa.cl da 5 recomendaciones para tener presente antes de comprar:

  • Revisar la situación financiera: es fundamental hacer una evaluación sincera de las finanzas y la capacidad de pago.

  • Establecer un presupuesto claro: es clave crear un presupuesto realista, priorizando las necesidades básicas y las deudas que se deben pagar.

  • Comparar precios y controlar el gasto: antes de comprar es importante cotizar distintas opciones y evitar gastos que superen lo que se puede pagar dentro del presupuesto.

  • Evitar el endeudamiento como primera opción: «Lo ideal es juntar dinero para comprar algo y dejar el crédito, aunque sea en cuotas sin interés, como última opción», recomienda Espinosa.

  • No recurrir a préstamos familiares o a cajas de compensación: “Puede parecer una solución rápida, pero es mejor explorar todas las alternativas antes de asumir estos compromisos que pueden empeorar la situación «, advierte Espinosa.

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