Aguinaldos y gastos en Fiestas Patrias ponen a prueba la caja de la pymes  chilenas

Septiembre, tradicionalmente asociado al impulso del consumo, también se convierte en un mes de alta exigencia financiera para las pequeñas y medianas empresas (PYMEs). A la necesidad de financiar aguinaldos se suma el incremento en costos operativos y la reducción de días hábiles por los feriados irrenunciables.

Según proyecciones de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), los hogares chilenos desembolsarán en promedio $210 mil durante las celebraciones de este año, un 3% más que en 2024. Solo en los días previos de Fiestas Patrias (12 al 17 de septiembre) se estima un gasto de $170 mil por familia.

A este escenario se suma el pago de aguinaldos. En el sector público, la Ley 21.724 fija que quienes tengan remuneraciones líquidas de hasta $1.025.622 recibirán $88.667, mientras que quienes superen ese monto accederán a $61.552. Aunque en el sector privado no existe obligatoriedad, esta referencia suele marcar las expectativas de los trabajadores.

Para las pymes, este escenario tensiona la liquidez. “Las Fiestas Patrias generan dinamismo en el consumo, pero para las empresas más pequeñas significan el gran desafío de anticipar recursos para beneficios laborales y capital de trabajo en un mes con menor actividad efectiva”, explica Nicolas López Lecube, Country Manager de la fintech Xepelin.

Liquidez bajo la lupa

En Chile, más del 60% de las facturas emitidas por pymes se pagan con más de 30 días de desfase, lo que obliga a muchas de ellas a recurrir a financiamiento alternativo. En ese contexto, soluciones como factoring o confirming han ganado terreno como mecanismos para asegurar capital de trabajo sin interrumpir la operación.

En este escenario, la digitalización financiera se ha convertido en una herramienta clave. Plataformas que permiten adelantar el cobro de facturas, automatizar pagos y proyectar flujos de caja en tiempo real ayudan a las pymes a sostener compromisos como el pago de aguinaldos sin deteriorar su capital de trabajo.

De acuerdo con Xepelin, incorporar el aguinaldo en el presupuesto anual, digitalizar la gestión de caja y proyectar la demanda con mayor precisión son prácticas que permiten reducir riesgos. “Con planificación financiera y apoyo de herramientas digitales, septiembre puede transformarse en una oportunidad para fortalecer la relación con los equipos y aumentar la resiliencia de las empresas”, añade el ejecutivo.

Síguenos en facebook

Comparte

Facebook
Twitter
WhatsApp