Después que Deanna Kohley, que trabaja en una organización de rescates de burros, compró una hembra llamada Jayla, supo que el animal estaba esperando cría.
Sin embargo, Kohley no tenía la menor idea de que Jayla estaba embarazada de un bebé muy raro.
Antes de que Jayla pariera, Kohley, junto con T&D Donkey Rescue Inc., la llevó al Centro de Salud Veterinaria de la Universidad Estatal de Kansas (K-State) “para asegurarse de que el bebé tuviese buenas posibilidades de sobrevivir”, según una publicación en Facebook con fecha del 26 de abril.
Jayla parió una cría con cara de burro y patas de cebra, muestran varias fotos del centro de K-State.
Fue solo entonces, cuando “resultó aparente” que Jayla había tenido un romance con una cebra macho antes que la comprase la organización de Missouri.
Ello convierte a la nueva cría—llamada Zyla— en un raro híbrido, mitad burro y mitad cebra, de acuerdo con la escuela. “Tanto Zyla como su madre están ambas muy bien en su hogar”, dijo el centro de salud.
Zyla no es el primer híbrido de su tipo (en inglés, se les ha dado en llamar zonkey) en aparecer de forma sorprendente. En abril de 2020, el grupo Sheldrick Wildlife Trust en Kenia, anunció que un ejemplar semejante había nacido de una cebra que el grupo rescató.
T&D Donkey Rescue le brinda asistencia medica a los burros que han sido abandonados, o abusados, según su página web.
“Si un burro no puede ser rehabilitado, física o psicológicamente, vivirá con nosotros hasta que se recupere por completo”, dijo el grupo sin fines de lucro.
La organización de voluntarios trabaja con burros que vienen de otros estados como Missouri, Arkansas, Oklahoma y Kansas.
Por Kaitlyn Alanis
Traducción de Jorge Posada
Fuente: EL NUEVO HERALD