Respecto a la suspensión del royalty a nuevos proyectos, se ha señalado que éstos estarán exentos del componente ad-valorem por cinco años; sobre esto precisó que «no necesariamente significa que quedarán exentos de royalty. El impuesto ad-valorem es sobre las ventas, por lo cual no considera las diferencias en los márgenes de explotación de las distintas empresas; por lo tanto, los productores medianos y pequeños que tienen costos más elevados que los grandes, se verán castigados».
Zauschkevich agregó que hay que conocer el proyecto en detalle para tener una opinión más acabada. «Sin embargo, hay que dejar claro que desde hace varios años, Chile no cuenta con nuevos proyectos en el sector minero y que sí así fuera, poner en marcha y comenzar a producir cobre, en este caso, puede tomar una década o más».
Finalmente, el presidente de la Cámara Minera de Chile dijo que hoy el cuestionamiento es respecto a las compañías que ya están operando, que lo hacen con yacimientos envejecidos, con bajas leyes y altos costos de producción. Incluso algunas de ellas aún no recuperan sus costos de inversión, por lo que si se aprueba el royalty ad-valorem, han indicado que ven con dificultad poder seguir operando.