- A pesar de la altura del piso desde el que cayeron, la niña no sufrió lesiones de mayor gravedad, gracias a que cayeron sobre un vehículo que amortiguó el golpe.
Una mujer de unos 45 años se ha precipitado con su hija de siete años en los brazos desde el quinto piso de un edificio situado en la avenida de Los Telares de Avilés, lo que ha obligado a su ingreso hospitalario, aunque la pequeña solo ha sufrido fracturas, mientras su progenitora ha resultado herida grave tras caer ambas sobre un coche estacionado.
La mujer, que al parecer tenía problemas con su expareja relacionados con la custodia de la menor, estuvo incluida en el Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género, conocido como Sistema VioGén, hasta 2020, y entre 2016 y 2018 estuvo vigente una orden de alejamiento, han informado a EFE fuentes de la Delegación del Gobierno este miércoles.
A pesar de la altura del piso desde el que cayeron, la niña no sufrió lesiones de mayor gravedad, gracias a que cayeron sobre un vehículo que amortiguó el golpe. La niña ha sido ingresada en el Hospital Universitario de San Agustín de Avilés (HUSA) con fracturas, mientras que la madre ha sido trasladada a otro centro hospitalario, han apuntado desde la Policía Nacional.
Varios testigos que han presenciado los hechos mientras se encontraban desayunando en un establecimiento frente al edificio han explicado a EFE que la mujer cogió una escalera para salir por la ventana con la niña cogida en brazos, mientras esta gritaba que no la tirara.
Sin tiempo de que nadie pudiera disuadirla, la mujer se arrojó al vacío con la pequeña en brazos ante el «estupor» de la gente que observaba la escena.
Fuentes cercanas a la investigación han apuntado que, unas horas antes, sobre las 6 de la mañana, el padre y la expareja de la mujer fueron detenidos por una pelea por la que tuvieron que ser trasladados al hospital.
La Policía Local de Avilés había informado a primera hora de esta mañana de la detención de dos hombres, de 44 y 65 años, que según estas fuentes ahora se confirman como padre y expareja de la mujer, en la avenida de San Agustín, por una pelea en la que utilizaron un bate de béisbol, un martillo, un cuchillo de cocina y un espray de pimienta.
Por su parte, la abuela de la pequeña, residente en otro piso del mismo edificio, se habría intentado cortar las venas por un ataque de ansiedad ante lo sucedido, aunque las lesiones que se ha autoinfligido son de carácter leve.
Fuente: El Confidencial