- El método de envasado ofrecido por Indura, perteneciente al Grupo Air Products, se aplica con éxito para que estos frutos lleguen en condiciones óptimas a destino.
- Chile es el segundo mayor productor de ese alimento a nivel global.
“Chile fue uno de los primeros países del hemisferio sur en exportar arándanos en contraestación. Comenzó en el segmento hace más de tres décadas y se ha mantenido por varios años en el primer lugar. Hoy en día, pese a haber bajado una posición, sigue cumpliendo un rol crucial para el abasteciendo del mercado norteamericano, principal consumidor de arándano chileno tanto fresco como congelado”, destaca Andrea López, ingeniera de desarrollo de negocios vitivinícola y alimentos de Indura, empresa perteneciente al Grupo Air Products. La compañía, que brinda el sistema de envasado MAP, es líder tecnológico en aplicación de gases para la industria alimentaria y desde hace 30 años está involucrada en su uso en la fruticultura.
La especialista destaca los beneficios de la aplicación de la tecnología MAP en la comercialización del arándano al exterior. “Gracias a esta opción es posible lograr que un mayor porcentaje de la fruta transportada llegue en buenas condiciones a destino, lo que se traduce en una mayor rentabilidad para el negocio. En tanto, para el consumidor final se obtiene un producto fresco y de características naturales”, explica.
¿Qué es la tecnología MAP?
La tecnología MAP es un método de envasado altamente recomendado para la conservación de alimentos, frutas y hortalizas. Mediante este sistema el ambiente que está en contacto con el producto, ya sea en bolsas (MAP) o contenedor (AC), es reemplazado por un gas de alta pureza o mezcla de gases que, acompañado de un control de temperatura tanto en almacenamiento como en transporte y adecuada hermeticidad en los envases o contenedor, permite extender la vida útil de los alimentos.
“En el caso particular de los arándanos, además de un control de temperatura específico en el contenedor, se realiza un primer barrido con nitrógeno y anhídrido carbónico si fuera necesario, para establecer una atmósfera inicial y se ajustan los porcentajes de mezcla de gases según la variedad a transportar o el requerimiento del cliente”, detalla la experta de Indura.
No es la única tecnología que se utiliza para conservar la fruta en los viajes extensos, pero tiene diferencias notables con otras opciones. La ingeniera señala que las tecnologías más antiguas tienen como base el uso de frío que, en cierta medida, ayuda a ralentizar el metabolismo de la fruta. Sin embargo, con el tiempo, dado el nivel de competitividad en el mercado internacional y los nuevos parámetros de calidad que han ido definiendo los consumidores actuales, tecnologías como la MAP y la AC están entre las más utilizadas.
“Para definir el tipo de tecnología, es preciso conocer la forma en que será consumido el producto. En el caso de fruta que será utilizada como base para mermeladas o topping de helados, por ejemplo, se puede utilizar congelación criogénica y transporte refrigerado, pero en caso de requerir frutas de aspecto fresco y rápida disposición para el consumidor final, la atmósfera controlada o modificada funcionan bastante bien”, explica López.
A pesar de la posición destacada del país en la exportación de arándanos, existen desafíos actuales vinculados a la contracción de la demanda post pandemia, el clima y la aparición de nuevos y fuertes competidores como Perú. “Es importante que desde Air Products Indura, como líder tecnológico en estas aplicaciones, podamos trabajar en conjunto con los productores y/o exportadores de la agroindustria chilena para mejorar la posición competitiva del país en concordancia con las exigencias del mercado actual”, concluye.