El país se convierte en el más grande de América Latina dondeel aborto es legal. También se permite en Cuba, Uruguay y Guyana.
El presidente argentino, Alberto Fernández, firmó este jueves (14.01.2021) el decreto para la promulgación de la ley del aborto, aprobada el 30 de diciembre pasado por el Senado, una normativa que según el mandatario permitirá crear una sociedad «un poco más igualitaria y un poco más justa».
Acompañado por representantes políticos y colectivos feministas, Fernández aseguró que con la ley de interrupción voluntaria del embarazo (IVE), la Ley 27.610, el Estado estará presente para salvaguardar la salud «que la clandestinidad no garantiza».
«He cumplido mi palabra, hoy tenemos una mejor sociedad, hoy tenemos una sociedad más igualitaria, hoy empezamos a escribir otra historia, la de buscar más derechos donde los desequilibrios aún existen», aseveró el jefe del Estado argentino, en un acto que tuvo lugar en la Casa Rosada.
Una vez se publique en el Boletín Oficial, la ley del aborto impulsada por el propio gobierno de Fernández, permitirá interrumpir voluntariamente el embarazo hasta la semana 14 de gestación de forma segura, legal y gratuita, siempre en un máximo de 10 días desde su requerimiento.
Más allá de esas 14 semanas de plazo, el aborto sólo se permitirá bajo las dos causales existentes hasta ahora y que rigen desde la aprobación del Código Penal en 1921: cuando corra peligro la vida de la madre o si el embarazo fue por una violación.
También ley de protección a la niñez
El texto legal también habilita la objeción de conciencia de los sanitarios que no quieran participar del aborto, siempre y cuando deriven a las pacientes a otros profesionales de la salud que sí lo hagan.
Junto con esta normativa también entrará en vigor otra ley, la de Atención y Cuidado Integral de la Salud durante el Embarazo y la Primera Infancia, más conocida como el «plan de los 1.000 días», que establece una nueva asignación anual para ayudar al cuidado de cada niño menor de tres años.
Con esta ley Argentina retoma la vanguardia de conquistas sociales en América Latina. En 2010 aprobó el matrimonio igualitario y en 2012 una ley de identidad de género.
La movilización de miles de jóvenes y colectivos de mujeres de la llamada ‘marea verde’ fue crucial para que la ley fuera aprobada en el Senado, que había rechazado un proyecto similar en 2018.
La ley cruzó en forma transversal a las fuerzas políticas y a la sociedad donde también cobró fuerza un movimiento antiaborto apoyado por las iglesias Evangelista y Católica en el país natal del papa Francisco.
Hasta ahora, el aborto en Argentina solo estaba permitido en caso de violación o de peligro para la vida de la mujer, según una ley de 1921.
gs (efe, afp, CNN)