Su extensión podría abarcar hasta un millón de metros cuadrados, y su corteza tiene más de 40 kilómetros de espesor
Tanto Foulger como su equipo no descartan que pueda estar pasando lo mismo en otros lugares, es decir, que pueda haber trozo de continente -por qué no, uno diferente- debajo de algún rincón de los que conocemos en la actualidad.
La teoría no está respaldada todavía por otros científicos detractores, pero tiene ramificaciones legales y políticas. Los países de todo el mundo están haciendo inversiones considerables para encontrar fuentes de minerales e hidrocarburos en el subsuelo. “Icelandia” ha sido catalogado como Patrimonio de la Humanidad, aunque todavía faltan comprobaciones científicas.
FUENTE: LA RAZÓN
EDITADA: TIERRAMARILLANO













