Katalin Erzsebet Bradacs es una húngara de 44 años que fue acusada en Italia de asesinar con un cuchillo a su hijo de dos años. El crimen denunciado ocurrió el pasado viernes, cuando la mujer, con el pequeño ya sin vida en sus brazos, ingresó en un supermercado de la ciudad italiana de Città de la Pieve, en la provincia de Peruggia.
Los investigadores no dudan de la autoría del crimen por parte de la mujer, que trabajaba como actriz en filmes pornos. Según la reconstrucción que realizaron en la justicia, Habría acabado con la vida del pequeño Alex como una manera de vengarse del padre del niño. Incluso, Bradacs le habría enviado a este hombre una foto del hijo de ambos malherido, poco antes de presentarse en el supermercado.
Según los testigos del hecho, la mujer ingresó al local comercial a los gritos y apoyó a la criatura sobre el rodillo de una de las cajas del supermercado, que se encontraba cerrada. Eran aproximadamente las tres de la tarde del viernes 1° de octubre.
Poco tiempo después, la policía encontró en la cartera de Bradacs un cuchillo, y muy cerca de su casa hallaron una remera manchada de sangre. “No hay duda”, de que el crimen lo cometió la madre del pequeño, dice el informe judicial del tribunal de Peruggia escrito para autorizar la detención de la mujer, y que fue publicado en parte en periódico local de Umbría 24.
El mismo escrito esgrime como pruebas del crimen lo que surge de las cámaras de videovigilancia, las declaraciones de los testigos y que “la mujer siempre estuvo sola con el niño en los momentos anteriores e inmediatamente posteriores a la comisión del asesinato”.
Además, en el lugar donde supuestamente ocurrió el crimen encontraron también los investigadores una serie de pruebas que incriminan a Bradacs. El mismo informe señala que la mujer habría apuñalado varias veces al pequeño en el cuello y el pecho.
El caso, que a cada momento brinda alguna novedad más horrorosa que la anterior, conmueve actualmente a toda Italia.
El testimonio del padre
Norbert Juhasz, el padre del niño, y que actualmente vive en Hungría, denunció en la justica que Bradacs había huido de ese país con su hijo un mes antes de que ocurriera esta tragedia. “Secuestró a mi Alex el día que se suponía que me lo entregaría, porque el tribunal me lo había confiado. Ella huyó a Italia y lo mató y luego confesó haberlo matado en un mensaje a un amigo”, contó el hombre en una entrevista al Carriere dell´Umbro.
El hombre contó también que Bradacs le envió, a través de su otro hijo, una fotografía por WhatsAppde Alex ya muerto. “Cuando vi esa foto no lo podía creer. Pensé que era falsa, pero lamentablemente no fue así. Era mi Alex ya muerto”, relató el hombre.
Contó también que había conocido a Bradacs en la escuela nocturna en 2019. Poco después, ella le informó que estaba embarazada. El padre agregó que, como ella se dedicaba a la pornografía, él le pidió hacer un examen de ADN a la criatura. También dijo que ella nunca había querido al pequeño.
«Durante el embarazo ella se daba golpes en la panza.Luego, tomó esteroides, y cuando nació, le dijo a la enfermera que se hiciera cargo del bebé, porque si no, lo haría ella”, narró también Juhasz.
El hombre agregó que la mujer se había ido con el menor varias veces antes, y que lo llevaba a vivir a la casa de su madre, donde el niño estaba en condiciones precarias. Por ello habría ganado la custodia. Sobre el final, ante la pregunta de si iba a ir a Italia a buscar al niño, el hombre señaló: “No. Solo quiero que Alex vuelva a casa. Todavía no puedo entender que mi tesoro no esté más”.