El presidente de la Corte de Apelaciones de Copiapó, Francisco Sandoval, encabezó la ceremonia con la que el Juzgado de Letras del Trabajo de la ciudad conmemoró el décimo aniversario de la entrada en vigencia de la Reforma Procesal Laboral, y también sus diez años de existencia.
En la ceremonia, a la que asistió el pleno de ministros del tribunal de alzada, la seremi de Justicia Margarita Contreras, representantes de la Dirección del Trabajo, la Inspección del Trabajo, la Defensoría Laboral, jueces y funcionarios, se puso un especial énfasis en que el tribunal copiapino fue pionero en la implementación de la nueva justicia laboral, junto al Juzgado de Letras del Trabajo de Punta Arenas.
“Fui testigo del inicio de las labores de este juzgado, en 2008. Conozco el trabajo que se desarrolla, la calidad de los procedimientos que se desarrollan en comparación con el antiguo sistema laboral; todo es más fluido, no hay incidentes, las defensas son sólidas, los fallos de calidad y los recursos muy acotados para no dilatar el término del procedimiento”, recordó el ministro Sandoval.
Del mismo modo, destacó la transparencia de la justicia laboral, con procedimientos nuevos, rápidos, que son entendibles por la gente. “Sus audiencias son públicas, con pruebas que se observan por todo el mundo. No hay nada oculto, todo es transparente”, enfatizó.
En tanto, la jueza presidenta del tribunal, la magistrada Fabiola Villalón, evaluó positivamente la vigencia de la reforma a la justicia laboral. “Nos pareció que era importante destacar la celeridad en la tramitación de los procedimientos, el importante cambio que significó pasar de un sistema ritual escrito a otro oral substanciado en dos audiencias, implícito en el nuevo procedimiento”, dijo.
Del mismo modo, destacó la labor efectuada por los funcionarios y funcionarias, así como la de Alejandro Bastías, actual administrador de la Corte de Apelaciones y que fue el administrador del juzgado laboral por casi ocho años; de la jueza Germaine Petit-Laurent y el juez César Torres, quienes actualmente se desempeñan en el Segundo Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago, así como el de todos quienes contribuyeron al éxito de la implementación de la reforma.
En su intervención, el magistrado José Marcelo Álvarez –quien es juez desde que comenzó sus funciones el tribunal laboral copiapino- recordó los orígenes del mismo como unidad judicial pionera, lo que le valió la posibilidad de realizar capacitaciones a integrantes de otros tribunales que comenzaron sus funciones con posterioridad. Asimismo, relevó el rol que le ha correspondido al tribunal en el resguardo de los derechos de los trabajadores.
