“Yo hice lo que mis abogados me indicaron. Mis decisiones siempre fueron adoptadas tras consulta a mis asesores”. Con estas palabras el suspendido alcalde de Tierra Amarilla, Osvaldo Delgado Quevedo, se refirió -a grueso modo- a la situación por la que ha sido requerido por la justicia.
Estas palabras las vertió a 24 horas de dejar las dependencias del Centro de Cumplimiento Penitenciario de Copiapó, donde permaneció detenido durante casi tres meses, cumpliendo la medida cautelar decretada por la fiscalía.
Sobre lo señalado por Osvaldo Delgado, su abogado defensor José Luis Andrés Alarcón, junto con expresar que “la prisión preventiva fue una medida excesiva”, hizo notar que “en un municipio, el alcalde no toma decisiones aisladas; siempre va a requerir de la opinión profesional de sus asesores, por lo tanto, en los reproches que se le hacen a mi defendido él no tiene responsabilidad exclusiva, sino que también se debe considerar la participación de sus abogados y otros asesores expertos que influyeron en la toma de decisiones”.
Por esta razón, puntualizó que discrepa de los delitos que el Ministerio Público le atribuye a su defendido, en vista de lo cual se abocará a preparar los antecedentes pertinentes para discutir jurídicamente las imputaciones formuladas a Osvaldo Delgado. “Los tipos penales que se le imputan no concurren en la especie. Se habla de negociación incompatible que en la práctica no es tal; también se habla de fraude al fisco con una empresa que trabajó y prestó servicios efectivamente, por lo tanto, tampoco concurriría el delito”, expresó el abogado defensor.
Finalmente, manifestó estar conforme con el cambio de medida cautelar adoptada por el Juzgado de Garantía, por cuanto su defendido ha colaborado permanentemente con las investigaciones que se llevan adelante, aportando valiosa información en la causa investigativa.
TIERRA AMARILLA, 21 de julio de 2018.
