Yovana Flores es una joven madre de origen boliviano que desde hace un tiempo se gana la vida vendiendo jugo de naranja en pleno centro de la ciudad de Copiapó.
En su segundo intento por establecerse en nuestra capital regional, vino primero hace algún tiempo para reunir dinero y trabajó haciendo aseo en dos establecimientos del retail. Luego se volvió a su patria, hasta que no hace mucho regresó y hoy se encuentra vendiendo jugos de naturales que, junto con refrescar a los sedientos y acalorados copiapinos, también contribuyen a la salud de sus clientes, gracias a la vitamina C que bien sabemos tiene en esencia la naranja.
“Como no encontré trabajo, me puse a trabajar en esto y le vendo jugo a la gente que acude a los bancos y a las notarías que están cercanas”, comenta, mientras atiende su bien higiénico carrito instalado en la esquina de Colipí y O´Higgins.
Tal como se aprecia en la fotografía que ilustra esta nota, ella ofrece su producto en un higiénico carrito adecuado especialmente para dicho servicio, el cual también tiene su historia: “Me lo soldó mi papá en Bolivia. Lo trasladé en un camión hasta la frontera, de allí en otro camión hasta Huara y, por último, en un tercer camión fletero que me trajo hasta Caldera. Allí hice dedo y un señor de buena voluntad me trasladó en una camioneta finalmente hasta Copiapó. Fueron hartos días de espera y de viaje para poder tenerlo en esta ciudad. Llegué un sábado y el domingo ya estaba trabajando acá”, comenta.
Así es que ya lo sabe, estimado lector, para calmar su sed y refrescarse en estos calurosos días de verano, nada mejor que saborear un nutritivo y natural jugo de naranja en pleno centro de Copiapó… y se lo ofrece esta emprendedora amiga boliviana, Yovana Flores.
