Un experimentado equipo de profesionales de la arqueología e historia buscaran resolver enigmas y despejar dudas sobre hechos sucedidos hace 160 años en Las Compañías (La Serena).
La Sociedad Pedro Pablo Muñoz Godoy realizará una prospección del Sitio batalla de Los Loros, en las próximas semanas, con un equipo de historiadores, arqueólogos, ingenieros y otros profesionales, para despejar dudas del polígono de la batalla, que sucediera hace 160 años, en la llamada “Revolución Constituyente”, que encabezaran: Pedro León Gallo y Pedro Pablo Muñoz. Esta institución tiene el comodato de casi 50 hectáreas y trabaja allí —hace muchos años—, para recuperar y asegurar el lugar, para las nuevas generaciones. Y dar cumplimiento con las obligaciones de la concesión del Ministerio de Bienes Nacionales.
Se busca hacer un registro exhaustivo y externo del lugar con un dron; verificar las tácticas militares y geográficas del desplazamiento de las tropas; verificar si es necesario hacer estudios y trabajos más profundos con el fin de empezar las operaciones de la construcción del “Monumento a los Héroes de Coquimbo”; recabar más información fina para la declaratoria de Monumento Histórico Nacional; situar la batalla en el contexto epocal y confirmar las armas, bagajes y transportes usados —procediendo con cautela para que cada vestigio sea debidamente resguardado—, a partir que el lugar conserva casi la misma topografía desde que sucedió la batalla; sistematizar toda la información histórica existente y todo hallazgo nuevo que pudiera encontrarse; cruzar la información histórica y arqueológica relevada generando un análisis geomático; elaborar un plano final de georreferenciación actualizado con las acciones castrenses llevadas a cabo, entre otros.
La labor que lleva adelante la Sociedad Pedro Pablo Muñoz Godoy es muy importante para el país; ya que la batalla de Los Loros es muy reveladora, porque los conflictos que allí se plantearon siguen vigentes, como la educación pública, una nueva constitución y la incorporación de la mujer a la vida ciudadana. Además, se pretende descifrar algunos enigmas importantes de la batalla, como saber dónde fueron sepultados los casi trecientos soldados que murieron en la contienda, dónde se atrincheraron las tropas; el alcance de las armas, especialmente de los cañones, e, incluso, saber si, antes de la batalla, hubo en ese sector vestigios incas o diaguitas.
Este proyecto denominado: “Prospección e interpretación histórica arqueológica en el sitio batalla de Los Loros”, cuenta con el financiamiento del Gobierno Regional de Coquimbo. Resultó ganador del concurso de “Actividades Especiales, 2019”. Su implementación ha sido demorada, rigurosa y detallada. Se ha buscado tomar todos los rigores de la ley al respecto, para asegurar que este estudio sea con los más altos estándares nacionales. Las inquietudes manifestadas por el CORE y el Gobierno Regional de Coquimbo han sido aclaradas debidamente por los especialistas en este tema, con lo cual se espera lograr importantes y definitivos avances; asegurar el lugar, la memoria histórica y el relato de los que dieron la vida para profundizar la democracia y lograr el reconocimiento de la comunidad nacional. “Estamos frente a uno de los mayores referentes del patrimonio espiritual del Norte”, señaló un directivo.
La Revolución de 1859 —que conmemora 160 años— empezó a desarrollarse cuando Benjamín Vicuña Mackenna observa que “la Moneda ya no es un palacio de administración pública, es una fortaleza, es la Bastilla”. Comenzó cuando nuestros diputados y representantes de algunas provincias no se sumaron a los arreglos nacionales de la Presidencia de Manuel Montt para favorecer la oligarquía que, con métodos fraudulentos, pretendía comprar por parte del Estado, bienes a particulares. Especialmente, en el hecho tremendo del negociado del Ferrocarril Valparaíso – Santiago, para adquirir las acciones a los empresarios. Esto trajo como resultado una tensión insoportable. Los mineros del norte ya estaban muy molestos con el Gobierno del Presidente Montt, porque los agricultores casi no tributaban; en cambio, ellos, pagaban altos aranceles. Además, los artesanos y, particularmente, los obreros de las faenas mineras, soportaban condiciones prehistóricas de trato en los laboreos y de abundante accidentalidad. Esto hizo que la comunidad pluriclasista de Atacama y Coquimbo se uniera. Y estallara la Revolución. El abuso y la prepotencia nunca se han resuelto en el Norte con balidos de ovejas. En Atacama se formó el “Ejército Libertador del Norte” encabezado por Pedro León Gallo. Se sumó, desde La Serena, Pedro Pablo Muñoz Godoy, el cual ya había participado en la Revolución de 1851. Este Ejército del Norte llegó a tener casi 2.000 hombres. Se construyeron cañones y otros armamentos. Se emitieron “Pesos Constituyentes”. Se nombraron autoridades. Pedro León Gallo fue elegido por votación popular, como Intendente Regional —el primero y único en Chile—. Se formaron batallones con los mineros de Chañarcillo y de otras faenas; de Chañaral, Caldera, Tierra Amarilla y Vallenar, y con intelectuales y artistas de la ciudad de Copiapó y La Serena. También, se sumó un contingente de la provincia de Coquimbo, provenientes de La Higuera, Vicuña, Ovalle e Illapel. Estas tropas tenían experiencias en las revoluciones anteriores; contaban con recursos que venían de las ricas minas, especialmente de Chañarcillo. También, había una efervescencia intelectual muy influida por los emigrantes europeos y la masiva presencia de exiliados argentinos que habían luchado contra la dictadura de Rosas.
Para conocer más de este proyecto en el sector, denominado “Sitio de la Batalla de Los Loros”, se trabaja en la creación de un referente, a partir de su notable patrimonio intangible y tangible y de ser símbolo de la dignidad y del sacrificio de las Regiones. La labor específica en el “Sitio de la Batalla de Los Loros” —en conjunto con muchos profesionales tales como arqueólogos, antropólogos, ingenieros, historiadores, poetas, etc.—; ha sido y es para preservar el lugar y que sea un Santuario de la Memoria. Para ello, se cuenta con cientos de apoyos expresos como el Ministerio de las Culturas, el CORE de la Región de Coquimbo, el Alcalde de la ciudad de La Serena, del Gobernador del Elqui, de varios diputados de la República; de los Premios Nacionales, Gabriel Salazar, Sergio Villalobos, Jorge Pinto Rodríguez, etc., y de muchísimas organizaciones culturales de Chile. Avanzamos en el propósito es que sea declarado a la brevedad Monumento Histórico Nacional por el Estado de Chile.
Rrpp.
SPPMG.