Para quienes forman parte de las nuevas generaciones de vallenarinos o han llegado últimamente desde otros puntos del país a radicarse en nuestra bella ciudad, les cuento que donde hoy está el Estadio Techado Municipal existía la bien recordada Escuela N° 3, conocida popularmente con el nombre de “Universidad del Río”. Pues bien, junto al muro norte de este colegio, el que daba hacia calle Sargento Aldea, funcionó por muchos años una feria hortofrutícola, en puestos que eran más bien ramadas que se levantaron para proteger los productos del sol o la humedad. Digamos puestos improvisados.
En esas condiciones funcionó esta feria popular hasta el 22 de abril de 1977, es decir, en una fecha como hoy, porque ese día -hace 43 años- fueron inauguradas las dependencias de la nueva Feria Horto Frutícola de Vallenar, en base a módulos de Steel panel que dieron un aspecto más digno al sector, el propio centro de abastos y al mismo servicio de venta.
En la vereda norte del tramo de las calles Brasil y Santiago funcionaba la venta al por mayor. Allí, junto a los camiones que llegaban desde Santiago o La Serena con los productos, se agolpaban los comerciantes dueños de emporios, fruterías o verdulerías, mientras que al frente, en las ya señaladas “ramadas”, operaba la venta al detalle.
“Este es el mejor mercado que he visto en mi vida, no es una simple feria. Yo lo encuentro magnífico y creo que reúne todas las comodidades que la población y los locatarios se merecen y así puedan realizar un trabajo digno”, expresó el entonces intendente de Atacama, coronel Arturo Álvarez Sgolia, durante la inauguración de este centro de abasto.
La ceremonia inaugural comenzó pasada las 10.30 horas, con la presencia de la ya señalada primera autoridad regional, también del gobernador provincial del Huasco; el alcalde Leopoldo Hernán Nilo Soupper y el seremi del Minvu, Alberto Guerrero Mercado, entre otras tantas autoridades comunales, provinciales y regionales.
En la ocasión, el alcalde vallenarino entregó un discurso típico para la época: “Esta obra que se construyó con fondos municipales, debió haber estado al servicio de la comunidad el año pasado, pero, debido a malos chilenos que, incluso, quisieron seguir haciendo politiquería en este Gobierno, que aún no se convencen que ahora tenemos un gobierno de orden y respeto, asignaron esta obra a sus amigos, a lo compadre, sin llamar a licitación como lo estipula la ley y a un costo de más del doble de la realidad. Pero, gracias a Dios, esos tiempos terminaron y hoy vemos cómo el país se levanta vigorosamente, después de haber estado agonizando”.
Por su parte, el presidente del Sindicato de Comerciantes Ambulantes y Feriantes de la Provincia del Huasco, manifestó que “terminaron los días de sacrificio, cuando estábamos expuestos a las inclemencias del tiempo y terminamos con el deambular de un lado a otro con las mercaderías, armando y desarmando los puestos. Aquí, frente a la bandera de nuestra patria, prometemos cuidar y mejorar esta obra que se nos entrega y, al mismo tiempo, ser el ente regulador de los precios y calidad de los productos que consume el pueblo de Vallenar”.
La nueva feria hortofrutícola fue bendecida por el cura párroco del templo San Ambrosio, Pablo Spencer, quien al terminar sus palabras dijo: “Dios está presente en todo aquello que significa progreso y bienestar para una familia y para el país”.
La ceremonia concluyó con la entrega de llaves de parte del intendente regional a algunos afortunados locatarios, como René Páez y Pedro Morales, para después proceder a un recorrido inspectivo de los diversos puestos junto a la comitiva oficial.
Obviamente, esta feria desapareció con el traslado de la Escuela 3 hacia la Población Carrera y la posterior construcción del Estadio Techado Municipal.
Sergio Zarricueta Astorga