Con un seminario online se conmemoró el Día Internacional de Conciencia sobre el Ruido

 

El ruido provoca efectos en la salud, desde el insomnio, estrés, hasta afecciones cardiovasculares. También produce deterioro cognitivo, principalmente a estudiantes en establecimientos expuestos a altos niveles de ruido ambiental.

Durante este periodo de cuarentena por el COVID19 se ha notado una rotunda baja en los niveles de ruido, sobre todo en la noche. Según datos del Ministerio del Medio Ambiente, existe una disminución de hasta un 75% en algunos sectores de la ciudad de Santiago, similar a lo que acontece con las ciudades en la región de Atacama.

Con el fin de promover la conciencia de los daños que los altos niveles de ruido producen al ser humano, hace 25 años se conmemoró por primera vez el Día Internacional de Conciencia sobre el Ruido, por el Centro de Audición y Comunicación de Nueva York.

En ese contexto, el Ministerio del Medio Ambiente anualmente realiza acciones de difusión, entre ellas, un Seminario sobre Ruido Ambiental. Este seminario cumple este año su vigésima versión, y se ha convertido en el más longevo seminario dedicado a la gestión del ruido ambiental urbano de Chile.

En esa línea el Seremi del Medio Ambiente de Atacama, Guillermo Ready, explicó que “fueron 3 días, con 2 charlas por jornada sobre temáticas que tienen que ver con la gestión del ruido, desde las regulaciones, el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, la información, pero también nuevas áreas de trabajo como el impacto del ruido submarino”.

El Seremi Ready agregó que “existen antecedentes de importantes de efectos en la salud, desde el insomnio, estrés, hasta afecciones cardiovasculares. También produce deterioro cognitivo, principalmente a estudiantes en establecimientos expuestos a altos niveles de ruido ambiental”.

Además, expresó que “muchas veces creemos acostumbrarnos al ruido o simplemente nos resignamos a convivir él, pero esto no significa que no afecte nuestro bienestar”.

El Seremi señaló además que “se estima que el 70% del ruido ambiental es responsabilidad del tránsito vehicular, y de éste, el mayor aporte es la locomoción colectiva”.

Del mismo modo, afirmó que “es por eso que como Ministerio tenemos una Estrategia de Gestión para el Control del Ruido Ambiental, en donde una de las iniciativas es impulsar la electromovilidad”.

La autoridad ambiental señaló finalmente que “no queremos ciudades sin actividad, eso es un imposible, pero ciertamente queremos ciudades más amigables, en donde existan niveles de ruido aceptables para un buen descanso y una mejor calidad de vida”.

 

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