Alcalde Cristian Tapia repudió esta actividad y lamentó la irresponsabilidad de la gente que participa en estas iniciativas reñidas con la ley y en medio de la pandemia que vivimos.
Su total repudio a las peleas de gallo manifestó el alcalde de Vallenar, Cristian Tapia Ramos, a raíz de la detención de una persona que participaba en este tipo de actividades en Hacienda Buena Esperanza. Al respecto, la primera autoridad comunal señaló que rechaza tajantemente este tipo de acciones porque “son ilegales y porque causan maltrato animal”.
El alcalde vallenarino agregó que la información la supo en forma reservada por un vecino, tras lo cual se contactó personalmente con el mayor de Carabineros, planificando un operativo que contó con la participación del equipo de seguridad municipal, que puso a disposición un set de fotografías captadas por el “dron” municipal, donde era posible observar una gran cantidad de vehículos en el lugar del hecho.
“En ese momento sentí una gran impotencia, por la tremenda irresponsabilidad de la gente reunida allí, tomando en cuenta que estamos viviendo una situación súper complicada con esta pandemia. Las peleas de gallos están prohibidas desde hace años, por lo tanto, se constata un acto ilegal y al mismo tiempo, maltrato animal, lo que repudio absolutamente”, indicó el edil.
Al mismo tiempo, el jefe comunal lamentó que la policía no haya podido capturar a la totalidad de los involucrados, quienes alcanzaron a huir ante la concurrencia policial, tal vez advertidos por algún cómplice. “Felizmente, se detuvo a una persona, de quien no conozco su identidad, la que fue pasada a detención de control y tendrá que asumir su responsabilidad en este acto ilícito”.
Finalmente, el alcalde Tapia destacó que esta detención se logró gracias al constante apoyo y trabajo conjunto que existe entre el municipio y la Policía de Investigaciones, Carabineros y la Fiscalía en el afán de detectar venta y consumo de drogas y otros ilícitos en la población local.
En tanto, el fiscal Nicolás Zolezzi Briones, informó que el imputado trasladaba a las aves en una maleta especialmente acondicionada para ello, mientras que el gallo más lesionado fue derivado a un veterinario que le diagnóstico serias heridas en la cabeza y el cuello, además de mutilaciones en sus patas.
