Por Guillermo Zurita B.
Abogado
Desde la firma del acuerdo por la paz, suscrito por gran parte de los partidos políticos en Chile, se da inicio a un proceso histórico para cualquier Estado y Sociedad, esto es lograr una nueva constitución, desde aquel momento se ha venido discutiendo sobre las implicancias y los alcances de este gran proceso político e histórico.
Vivimos un momento complejo, con graves problemas de legitimidad y un enorme deterioro del debate público, donde semana a semana se torna simple, lleno de trincheras, con discursos de nicho y sin rigurosidad intelectual. Donde también se ha generado un sentimiento de desesperanza y de desconfianza los cuales se han apoderado de muchos chilenos. pero estando a menos de dos meses del plebiscito del 25 de octubre y con una franja electoral próxima a partir, se genera una oportunidad, la de elevar el debate y ponerlo en contexto.
El método es el mensaje, debemos mirar la virtud del proceso, la forma y manera que abordemos el debate, esto permitirá darle legitimidad al proceso constituyente, cuya constitución, cuyas normas, cuyos derechos y deberes serán, tuyos, serán míos y serán de todos.
Todos tenemos la responsabilidad de asumir el debate constitucional ,hacernos parte, poner en contexto la discusión, trabajar colectivamente para que por la vía democrática e institucional, podamos construir la casa de todos, una casa donde podamos convivir sanamente, dialogar y escucharnos todos quienes vivimos en este hermoso país.