Francesca Vives Figueroa, Académica Arquitectura UCEN Región Coquimbo
El Plan Regulador Comunal de la Serena, recién aprobado por el MINVU, demandó para ello una larga espera de 16 años y reemplazará a la normativa vigente que data desde el año 2004. Periodo extenso desde mi punto de vista, ya que he podido observar el crecimiento en algunas ciudades en Chile, que en no más de 6 años muestran impactos urbanos considerables, por lo cual debería existir un plazo mucho menor entre un plan regulador y el nuevo.
Es importante entender, la ciudad como un área en constante proceso de transformación. Y que cada intervención que en ella se realice afecta directa e indirectamente a todos sus habitantes, por lo cual es un deber ciudadano, ser partícipe de los procesos de consultas, en los cuales debemos indicar qué queremos y no queremos en nuestros asentamientos urbanos.
Sin detallar el plan regulador propiamente tal, es muy importante contar con esta herramienta, porque permite regular y proyectar el desarrollo sostenible de la ciudad, para que sean satisfechas tanto las necesidades de los actuales habitantes como de las nuevas generaciones y posibilitar la búsqueda del equilibrio entre el medio ambiente en que se emplaza; entre el valle y el mar, la población tanto fija como flotante (turistas principalmente) y la economía que se genera en esta interacción.
Dejo desde aquí la invitación a estar atentos a como se lleva a cabo la aplicación de este plan urbano, desde una mirada como ciudadanos, arquitectos y urbanistas. A cómo será el crecimiento de la zona de borde costero, a sus vías de tránsito vehiculares, de salidas peatonales de emergencias en caso de tsunami – que considero es un punto débil hoy en día.
Es importante además la conservación del patrimonio arquitectónico, legado del Plan Serena, llevado a cabo entre los años 1948-1952, bajo el Gobierno de Gabriel González Videla y que la hace única por poseer la configuración de ejes importantes, con edificaciones de gran valor arquitectónico, que deben ser conservados en el tiempo.
Este nuevo Plan Regulador para la ciudad de la Serena, estima generar 4500 nuevos empleos en el sector de la construcción, lo cual es un número interesante, considerando los efectos negativos que ha generado la pandemia en región de Coquimbo.
