Sorpresas, inesperadas derrotas e hitos históricos, marcaron la elección municipal en Atacama

Varias sorpresas se dieron en la elección de alcaldes en la región de Atacama, donde el principal perdedor fue el conglomerado oficialista de Chile Vamos. Esta contienda se cerró con la reñida lucha que se dio por los sillones edilicios de Alto del Carmen y Copiapó, cuyos conteos terminaron pasada la medianoche.

La principal novedad se dio en Chañaral, donde el alcalde vigente –Raúl Salas- (independiente con cupo de Chile Vamos) no pudo retener su cargo y fue derrotado por la representante del Partido Radical Margarita Flores, quien se impuso por 40.61% (2.169 votos) contra 32.84% (1.754 votos). Al final, el periodista Salas solo pudo mantenerse un periodo al frente del municipio chañaralino, ya que su gestión –a la luz de los resultados- no fue aprobada por la ciudadanía.

En Tierra Amarilla, el candidato Cristóbal Zúñiga (Partido Comunista) consiguió un claro y contundente triunfo con un 47.83% (2.853 votos).

En el puerto de Caldera, la actual jefa comunal, Brunilda González (PPD) consiguió un categórico 52,69% de los votos (3.805) respecto de su contendor más cercano: Emilio Bianchi (RN) que solo llegó al 29,47% de los sufragios (2.128). Por lo tanto, la triunfadora consigue su segundo periodo consecutivo al frente del municipio porteño.

En la comuna de Freirina, el triunfador inapelable fue el candidato César Orellana (PS), quien comenzó a celebrar anticipadamente su triunfo, ya que la amplia tendencia favorable la obtuvo desde la primera mesa leída, por lo que no resultó una sorpresa que haya conseguido a su favor el 68 por ciento de los votos emitidos (2.085 votos), contra el 32 por ciento de su rival: Nicolás Gallardo (RN) que solo llegó al 32 por ciento de las preferencias populares (981 votos).

  • En Alto del Carmen se dio un hecho histórico, ya que después de 30 años de hegemonía de Renovación Nacional, la derecha cedió su lugar al candidato Cristian Olivares (PR), quien era concejal en ejercicio, y logró vencer a la abanderada oficialista Diana Lobos (RN). Los guarismos fueron 52.29% (1.493 votos) para el triunfador y 47.71% (1.362 votos) para la derrotada.

Donde el panorama se vio estrecho al máximo fue en Copiapó, donde el alcalde vigente Marcos López logró afianzar su triunfo casi al finalizar el conteo de votos, ya que muchas veces estuvo abajo en la suma, lo que provocó gran expectación entre los adeptos y contrincantes que esperaban ver derrotado al independiente de Unidos por la Dignidad. López consiguió finalmente el 23.86% de los votos (10.481) contra el 23.70% de Maximiliano Barrionuevo (independiente Chile Vamos), quien obtuvo 10.413 votos. Sin duda, la gran sorpresa que fue mucho más competitivo respecto de las expectativas de su propio sector. En tercer lugar, se situó Inti Salamanca con el 21.47% y la suma de 9.433 sufragios.

  • En Diego de Almagro, también ocurrió otro hito histórico, con la derrota de la izquierda que, desde el regreso a la democracia, tenía el control político de esta comuna. En esta ocasión, el triunfador fue Mario Araya (RN) quien alcanzó el 50.24% de los sufragios (2.594 votos) contra el 43.93% de su contendora más próxima, la representante del Partido Comunista, María Torrejón, quien alcanzó la suma de 2.268 votos. El triunfo de Araya era una de las cartas más previsibles en las apuestas previas a nivel regional.

En tanto, en el puerto de Huasco, el inesperado triunfador fue el profesor Genaro Briceño, con el 37.46% de los votos (1.688) contra el 29.01% de su perseguidor más próximo, el independiente fuera de pacto Daniel Díaz que alcanzó a su favor la suma de 1.290 votos. Rony Acuña, la carta UDI, fue el gran perdedor de esta contienda, ya que muchos de su sector lo daban como seguro ganador.

Finalmente, en la comuna de Vallenar, se impuso el independiente fuera de pacto Armando Flores, quien logró sumar el 28.98% de los votos (5.099), siendo asediado por el también independiente fuera de pacto Víctor Isla que consiguió el 26.68% de las preferencias (4.695 votos). Los grandes perdedores fueron Pablo Ogalde (RN) y Karina Zárate, la “hija política” del ex alcalde Cristian Tapia.

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