Utilizando Inteligencia Artificial, Maxxa realiza en pocos minutos la evaluación crediticia del interesado, la que de ser aprobada otorga acceso a una línea de crédito de hasta 50 millones, entre otros apoyos financieros.
Además, destacan la confiabilidad de las garantías que ofrece, elemento clave a la hora de buscar oportunidades de negocios en Mercado Público.
Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en Chile existen más de 2 millones de pequeñas y medianas empresas, pilar económico que representa al 65,3% del total de los empleados formales en el país.
De ellos, son miles los que deben enfrentar, mes a mes, las consecuencias económicas causadas por la pandemia. Estamos hablando de realidades como “necesito plata para pagar los sueldos” hasta “me salió un buen negocio, pero necesito capital de trabajo”, todas instancias donde son pocos los que tienen la espalda financiera -o caja- para reaccionar.
Para resolver ese tipo de situaciones nació la Caja Maxxa, solución desarrollada por la Fintech chilena instalada como alternativa rápida de apoyo financiero, y que busca potenciar el desarrollo de las pymes en Chile.
“Existe ese dolor dentro de las pymes, que sienten que las instituciones financieras no les dan mucha atención”, explica Juan Pablo González, CEO de Maxxa.
Qué hay en la caja
Se trata de un conjunto de ayudas financieras que llegan a salvar a la pyme que lo necesita. Específicamente estamos hablando de:
Maxxa Créditos: se separan en Línea de Crédito y Crédito Empresas. El primero corresponde al acceso a una cuenta de hasta 50 millones de pesos, límite que puede crecer dependiendo del buen comportamiento del interesado. Se puede abrir de manera gratuita, 100% digital y en cuestión de minutos. Si no se usa no se paga y no tiene costo de mantención.
Por su parte, el Crédito Empresas es un crédito con garantía hipotecaria. En este caso, se deja como garantía una propiedad en modo hipoteca. Con eso, se accede a un préstamo de hasta 400 millones de pesos a libre disposición con plazo de hasta 20 años, con la cuota más baja del mercado.
A lo anterior se suman las Maxxa Garantías, o “Certificados de Fianza” emitidos a través de una Sociedad de Garantía Recíproca, con una clasificación de riesgo A+. “La diferencia es que la versión Maxxa tiene menores exigencias para su emisión, siendo accesible de manera 100% digital y sin pedir retención de fondo ni inmovilizar capital de trabajo. Además, si estás registrado como cliente y tienes una línea de garantía abierta, te demoras apenas unos minutos en emitir tus garantías”, explica González.
El giro tecnológico
Aunque existen muchas soluciones financieras similares, la clave de Maxxa (www.maxxa.cl) está en su rapidez: a diferencia de los bancos que se demoran semanas en aprobar cualquier tipo de asistencia financiera, Maxxa lo hace en cosa de horas usando Inteligencia Artificial.
“Obtenemos datos desde múltiples fuentes de información, tales como SII, deudas, morosidad, ventas, quiebras y/o deudas previsionales- para construir el ‘perfil del cliente’. Esto, sumado a su comportamiento histórico, nos permite aplicar un algoritmo para, en caso de que califique, asignarle una oferta de crédito”, precisa González, haciendo referencia al sistema que obtiene datos de la empresa, disponibles en Mercado Público, y los cruza rápidamente para determinar el nivel de riesgo del interesado.
Así responde al requerimiento de manera rápida para “salvar” a la pyme en cosa de horas. ¿La idea? Apoyar en general al ecosistema y sumarse al resto de las instituciones financieras que a veces no pueden responder como lo necesitan las pequeñas y medianas empresas.