Oficiales, Suboficiales, Soldados Conscriptos y de Tropa Profesional, ellos son parte de la estructura del Ejército, pero en conjunto también existe un grupo de personas que al igual que el personal de línea, cumplen una tarea fundamental para la Institución, con esto nos referimos a los reservistas del Ejército que desde sus profesiones logran aportar conocimiento y asesoría al mando. Quien forma parte de este grupo es Ricardo Aburto R., un oftalmólogo de 48 años quien hace 13 años atrás tomó la decisión de formar parte de la reserva del Ejército en la Compañía Capitán José Luis Araneda de la Escuela Militar.
“Recuerdo que yo participaba en cursos de Historia e Historia Militar y el escuchar la experiencia de los oficiales de línea me causaba interés por saber más y ser un aporte a la Institución”, así es como el hoy Teniente Ricardo Aburto recuerda el primer acercamiento que tuvo a la Institución manifestando que superó con creces su expectativa. “Uno como civil ve al mundo militar como algo muy hermético, y eso genera muchos dichos, pero cuando uno entra es totalmente diferente, conoce lo que es la camaradería en su esencia, además del quehacer del Ejército”.
Es de esta manera es que en el año 2009 el Teniente Aburto ingresó a la Reserva, “desde que ingresé a estudiar Oftalmología siempre fue con el fin de ayudar a las personas y cuando ya ejercía mi profesión sentía que debía ampliar esa ayuda”, las palabras de Ricardo Aburto apuntan directamente a la labor que realiza el Ejército, no tan solo en el área de la defensa, sino también en apoyar la acción del Estado llegando a las comunidades de difícil acceso y entregar la ayuda necesaria en esas zonas, por lo mismo es que vio en la reserva la oportunidad de colaborar y entregar conocimiento con total desinterés y voluntariedad.
“En mi caso como oftalmólogo me ha tocado participar en operativos médicos (…) un ejemplo de ello es lo que viví en la comuna de Neltume ubicado en la Región de Los Ríos, donde pude entregar mi experiencia como profesional a la gente que no tiene acceso a especialistas” esto es parte del sentimiento de orgullo que siente el oficial de Reserva que ya en sus años de servicio lleva más de 50 operativos médicos, en donde aparte de cumplir con su profesión, sirve al país.
Cabe destacar que la Compañía Capitán José Luis Araneda en la que se desempeña el Teniente Aburto, fue fundada en el año 2007 con el propósito de contar con profesionales altamente capacitados, esto con el fin de aportar desde sus áreas de especialidad, además de evidenciar un significativo aporte a la Institución, ya que son médicos, periodistas, ingenieros, historiadores entre otros, quienes a través de su profesión, entregan una visión mucho más amplia la cual permite al Ejército crecer en sus diversas áreas de misión.
Si bien el espacio diario de trabajo de Ricardo Aburto es en una Clínica privada, manifiesta siempre estar disponible para cuando así lo requiera la Institución, “por lejos una de las mejores decisiones de mi vida fue ser parte de la Reserva Ejército, me siento completo de ser un aporte en mi lugar de trabajo como también sirviendo al país en operativos médicos o en donde se me necesite”, cerró Aburto.