La instancia de la Convención Constituyente aprobó anoche las normas sobre el Estatuto Constitucional de los Minerales que pasarán al informe de reemplazo que deberá votar el Pleno este sábado. La Asociación de Proveedores Industriales de la Minería cuestionó especialmente la norma que señala que, en el caso del cobre, el “Estado explorará y explotará por sí mismo, y podrá hacerlo en asociación con particulares siempre resguardando la participación mayoritaria del Estado”.
La Comisión de Medio Ambiente de la Convención Constitucional aprobó este lunes el informe de reemplazo a su segundo informe, el cual ya había sido rechazado en general por el Pleno. Las indicaciones admitidas y que consideran los artículos relacionados con el Estatuto Constitucional de los Minerales, serán votadas por el Pleno este sábado.
Desde la Asociación de Proveedores Industriales de la Minería (APRIMIN) criticaron que los convencionales de la Comisión insistan en delegar al Estado la responsabilidad de desarrollar prácticamente toda la actividad minera, algo que ya ha sido cuestionado en instancias previas. El gremio criticó especialmente la Indicación 150 donde se incorporan sustituciones al Artículo 27 y que estipula que “en el caso del cobre, el Estado explorará y explotará por sí mismo, y podrá hacerlo en asociación con particulares siempre resguardando la participación mayoritaria del Estado, considerando que es imposible para el Estado financiar las inversiones que la minería requiere en el futuro, de más de US$ 68.000 millones, ya que debe privilegiar los derechos fundamentales”.
Para APRIMIN, la Comisión está desconociendo todos los aportes que ha realizado la minería privada al país, que se ha trabajado fuertemente en las últimas décadas por cumplir con altos estándares sociales y medioambientales y cuyo apoyo además, a través de la tributación, es clave para solventar las grandes reformas que pretende impulsar el país a futuro.
“A través de esta redacción, se insiste en una Constitución que promueve, en forma indirecta pero clara, la nacionalización de la minería, como si no les importara que el mundo es hoy global, perjudicando nuevas inversiones y con negativos efectos para todas nuestras exportaciones de muchos productos porque van a muchos países que tienen inversiones mineras en Chile; esto, porque en el comercio internacional existe la reciprocidad. No compartimos la obsesión de estos convencionales por entregarle al Estado la responsabilidad de invertir, desarrollar, explotar, producir y exportar los recursos minerales, en vez de haber establecido -tal como lo esperaba la mayoría de los chilenos- las bases para asegurarle al país una industria minera sustentable, preocupada por el medio ambiente y que aporta valor a las comunidades donde opera. Confiamos en que el Pleno sabrá enmendar el rumbo por el bien de Chile”, comentó Sergio Hernández, director ejecutivo de APRIMIN. Agregó que «en lugar de establecer un modelo de desarrollo minero que, con sus tributos y empleo aporte a la Agenda Social, lo que proponen a los chilenos es un régimen cerrado que hará imposible su financiamiento, o sea, más pobreza»
El representante del gremio criticó también que se insista en el término “autorizaciones caducables y no renovables” -en vez del vigente sistema de concesiones mineras- y que serán entregadas en forma temporal: “Lamentamos que los convencionales insistan en un concepto débil y que daña de muerte la tan necesaria certeza jurídica, ya que las inversiones mineras son de recuperación de largos plazos, hasta de 15 o más años. Estas modificaciones no dan garantías a los inversionistas y, así, se impacta negativamente al conjunto de la minería y su red de encadenamientos, como los miles de proveedores, el empleo y poblamiento de la zona norte de Chile y su importancia geopolítica. Principalmente por desconocimiento de la industria y también por sesgo, la Comisión de Medio Ambiente está repitiendo errores que perjudican a la minería y al país en general”, señaló.
Respecto de la votación de estas indicaciones que llevará a cabo el sábado el Pleno, Hernández enfatizó que es necesario que se tome el real peso de lo que significaría para el país aprobar iniciativas que precarizan y dañan a la minería. “Chile siempre ha sido y seguirá siendo un país minero. Hoy tenemos una tremenda oportunidad que nos dan los mercados internacionales para dar un salto cualitativo y proveer los minerales que necesitará el planeta para la transición energética, no perdamos esta oportunidad. En la medida en que sigamos desarrollando nuestra minería podremos traer más progreso a nuestras regiones y a los chilenos en general”.