Con el fin de conformar una mesa de trabajo intersectorial para la atención integral a las familias de campamentos e informar del estado de los campamentos en la Región de Atacama, criticidades y oportunidades, este viernes se realizó la primera reunión de la Mesa de Trabajo Intersectorial de Campamentos en la actual administración del Gobierno del Presidente Boric en Copiapó.
La jornada contó con la presencia de la vocera de Gobierno regional, Sofía Vargas Roberts, y autoridades y representantes tanto de las distintas carteras del Gobierno Regional como de la PDI y Campamentos Atacama, donde se presentó el programa y se analizó la criticidad social en campamentos, como la vulnerabilidad social, los delitos de connotación social y violencia de género, infancia migración, habitabilidad primaria (agua potable y electricidad), entre otros.
Al respecto de la iniciativa, la seremi de Gobierno de Atacama, Sofía Vargas, dijo que “es sumamente relevante que como autoridades, junto a los ciudadanos, podamos trabajar en dar soluciones a los problemas que en si trae el asentamiento de campamentos para las familias en nuestra región, como la habitabilidad primaria o la violencia de género, teniendo en cuenta y reconociendo que es un problema social que se debe erradicar”.
“Como Gobierno Regional, estamos comprometidos a trabajar seriamente en esta mesa y contribuir a las soluciones de una problemática que se viene asentando hace años en Atacama. Donde, lamentablemente, nos tiene como la segunda región del país con más campamentos, con un aumento del 45% de ellos en dos años, llegando a casi 5 mil en la actualidad”, cerró la vocera de Gobierno, Sofía Vargas.
Cabe destacar, que de acuerdo al último catastro realizado por el Minvu en 2021, la Región de Atacama posee 121 campamentos, que corresponde a 4.633 hogares y un aumento en un 45% en 2 años, concentrados en las comunas de Copiapó, Tierra Amarilla, Vallenar y Huasco. Segundos a nivel país en cantidad de campamentos, después de Antofagasta. Aumento en la región que se basa principalmente por las dificultades de acceder a una vivienda, el alto valor de los arriendos y el aumento de inmigrantes.