Por Luis Nuñez Barrientos.
El pensar en la ciudad no es ajeno a nadie, y aunque pudiese ser un tema técnico desde el punto de vista de la planificación comunal y del urbanismo, requiere del aporte de todos quienes vivimos en ella. Por ello hoy es importante hablar de la congestión de tránsito, la cual ha ido en notorio y vertiginoso aumento en nuestra comuna, y todo indica que seguirá agravándose por la acción antrópica del hombre, por una mala planificación o peor aún el desinterés de nuestras autoridades en esta materia. La mala planificación de transito trae como consecuencias la progresiva reducción de las velocidades de circulación, que se traduce en incrementos de los tiempos de viaje, tanto en vehículos particulares como de la locomoción colectiva, ello trae un aumento en el consumo de combustibles e incluso por el lento y tedioso desplazamiento, pueda ocurrir atrasos en las jornadas laborales, escolares e incluso sin exagerar la perdida de alguna hora médica, que con la escases de médicos y especialistas en nuestra ciudad se convierte en una verdadera tragedia.
Por ello es incomprensible desde el punto de vista técnico y ciudadano que los organismos públicos relacionados directamente con estas obras y cada una de las autoridades electas o designadas que algo siempre tienen que decir o decidir en la materialización de alguna política pública u obra de desarrollo urbano, no consideren que cerrar o realizar trabajos simultáneos en diferentes accesos/salidas del Palomar, afectara negativamente la calidad de vida de sus vecinos, creando un caos de tránsito vial artificial que pudo ser perfectamente evitable con una buena planificación y participación ciudadana.
Es inaceptable que mientras los vecinos esperan por años solución a temas relacionados con la conectividad y seguridad vial, tales como nuevas vías de accesos y salidas, lomos de toros, semáforos y un largo etc. Reciban hoy de sus autoridades una disminución de su calidad de vida, por más que se diga que el progreso tiene sus costos, el disminuir los impactos negativos debe ser un aspecto fundamental que hay que tener en cuenta cuando se gestiona un proyecto.