Tomando en cuenta y considerando que los ahorros previsionales son el resultado de toda una vida de sacrificio y ahorros de los trabajadores chilenos, soy partidaria y apoyo firmemente que esos recursos le pertenecen a los trabajadores y que deben ser heredables. No estoy de acuerdo con dejar que el gobierno de turno decida sobre estos ahorros que han sido el fruto de años de vida laboral. Hoy, la mayoría de los ciudadanos rechaza la idea de que el Estado administre sus fondos previsionales, imponiendo un sistema de reparto donde la seguridad de ese dinero podría haberse afectada.
Por eso es que considero con mucha firmeza que los trabajadores deben ser dueños de sus ahorros actuales y futuros y que éstos sean heredables. Por otra parte apoyo la libertad de elegir si son las instituciones públicas o privadas quienes deban administrar nuestros fondos.
Escribamos juntos una Constitución que nos permita asegurar nuestras pensiones.