Por Emma Venezian, directora de la Unidad de Estudios Clínicos de Sanofi para Cono Sur.
En el marco del Día Internacional de los Estudios Clínicos, se hace cada vez más relevante poner en valor el aporte de este tipo de investigación en la vida de cientos de pacientes alrededor del mundo. Los estudios clínicos son un paso esencial en la introducción de nuevos tratamientos, y además contribuyen al conocimiento médico y mejoran la calidad de vida de quienes participan en ellos.
Si bien este tipo de investigación se realiza hace años y ha ayudado a controlar diferentes enfermedades -siendo la más reciente el COVID-19-, su naturaleza hace que estén en constante evolución y adaptándose a la tecnología disponible. Uno de los principales desafíos que ha enfrentado este campo a lo largo de su existencia es el de generar estudios representativos e inclusivos de las diferentes comunidades, y con esto reducir la desigualdad en el acceso a la salud.
En Sanofi, compañía farmacéutica de origen francés con presencia en Latinoamérica desde hace más de 60 años y con más de un siglo de historia y experiencia en salud a nivel global, nos hemos fijado como meta, hacer de nuestras investigaciones un área inclusiva que congregue a diferentes culturas y etnias y que sea totalmente transparente con los pacientes, ya que creemos que la diversidad funciona como un acelerador para la innovación.
En esa línea, hemos identificado diferentes variables, que están presentes desde el inicio de una investigación, para hacer de este proceso uno más eficiente y representativo. Realizar un muestreo que incluya a las minorías es clave para garantizar que los resultados de un estudio representen a la población en general, y de esta forma evitar entregar resultados sesgados. Este grupo suele tener menor acceso a la salud, por lo que abrir espacios donde participen activamente contribuirá, sin dudas, a obtener una información más clara que repercuta en tratamientos eficaces.
Por otro lado, es necesario tener en cuenta consideraciones culturales para incluir a comunidades de origen étnico dentro de los ensayos clínicos y estar atento a las barreras de lenguaje que se puedan presentar para que los pacientes tengan total comprensión del estudio y sus implicancias, y sientan que colaboran con una compañía responsable, ética y transparente.
Como actor relevante del sistema de salud en Chile, desde Sanofi estamos comprometidos con la diversidad, la equidad y la inclusión y trabajamos día a día para que se refleje tanto hacia los pacientes como a nivel interno con programas DE&I que promueven la inclusión de personas con capacidades diferentes, diferentes contextos socio-económicos y que promueven la diversidad etaria, además de una política de licencia parental de 6 meses pagos sin distinción de ningún tipo para no frenar el desarrollo personal y profesional de nuestro equipo y que cada uno pueda ser su mejor versión.