Magdalena de Quevedo, nutricionista y CEO y directora de Clínica Acorpus , especializada en medicina estética y cirugía ambulatoria, entrega recomendaciones prácticas para evitar excesos y lamentos post 18.
Estando a tan solo a unas cuantas semanas de distancia de una nueva la celebración de Fiestas Patrias, es prácticamente imposible no hacer la relación de esta fecha con el disfrute de los platos típicos nacionales: empanadas, anticuchos, asados, choripanes, terremotos, vino y chicha. Se tratan de preparaciones y bebestibles que tienen dos denominadores comunes: son un deleite para el paladar, y también son hipercalóricos.
Para tener una referencia, una sola empanada de pino al horno puede tener entre 350 y 400 kcal, un choripán que incluye aderezos, como mayonesa, puede llegar a aportar 450 calorías. Y, si tomamos en cuenta que expertos en nutrición recomiendan que un almuerzo o una cena no supere las 600 calorías, llegamos al punto sin retorno que consumiendo una sola empanada ya prácticamente estarías lista (o) con la cuota de calorías de una sola comida.
Por otro lado, los terremotos, trago que se ha convertido en un clásico en estas fechas, aportan en promedio 400 calorías. Y si somos realistas, nadie se come una sola empanada o solo un terremoto.
Bajo este contexto, es posible, llegar a subir hasta 5 kilos o más durante estas celebraciones. Pero la buena noticia, es que no tiene por qué pasar, y que, para evitarlo no implica, como muchas (os) podrían pensar, privarse totalmente de los platos criollos, sino que simplemente moderarnos, buscar el equilibrio y evitar los excesos.
Magdalena de Quevedo, nutricionista y CEO y directora de Clínica Acorpus , especializada en medicina estética y cirugía ambulatoria, explica que “uno de los grandes errores que cometen las personas es preocuparse de los hábitos saludables y del ejercicio en fechas específicas, como por ejemplo, las celebración de fiestas patrias, los festejos de fin de año y el verano, cuando realmente hay que preocuparse todo el año y no solo enfocarse en lo estético, sino que en la salud”.
“Si mantienes hábitos saludables durante todo el año, estas fechas especiales no tendrían por qué generar alarma o la planificación de dietas post celebraciones que tienden a ser sumamente privativas, poco efectivas y peligrosas”, advierte la experta.
Ahora, también es importante señalar que, junto a los hábitos saludables, existen tratamientos corporales que apoyan esta misión y que puedes encontrar en Acorpus, entre ellos están:
-Desafío 27 días: Tratamiento reductivo intensivo apoyado de aparatología y tratamiento farmacológico para bajar de peso y faja compresiva. Permite perder desde el 10% del peso corporal en 1 mes.
-Lipo sin cirugía: Tratamiento diseñado para modelar tu cuerpo sin necesidad de someterte a una intervención quirúrgica, permite perder desde una talla. Puedes escoger 10 o 20 sesiones según sea el requerimiento de cada paciente.
-Drenaje linfático: Tratamiento ideal tras una cirugía como también para mejorar la piel de naranja, la retención de líquidos e inflamación corporal.
Consejos para un 18 más saludable
“La ecuación es la siguiente: si bien en el cuerpo requiere de calorías para su correcto funcionamiento, cuando se consumen más calorías de las que se necesita o más bien, se gastan menos calorías de las que se consumen, la subida de peso es inminente”, agrega la profesional.
“Ahora, el tema no va por privarte de las empanadas y de los terremotos, o pasar todos esos días comiendo solo lechuga, sino en moderar las cantidades por día, e ir compensando si es que algún día te excediste con la ingesta de calorías”, enfatiza la nutricionista.
Y para ello la profesional de Clínica Acorpus entrega las siguientes recomendaciones a considerar: “hay que partir de la base que todas las bebidas alcohólicas nos aportan azúcares y calorías, generando no solo una posible subida de peso, cuando no nos medimos, sino que, además generándonos deshidratación e inflamación. Además, pueden generarnos resequedad de la piel, haciendo más visibles las líneas de expresión. Además, es importante recalcar que, el consumo de alcohol no nos entrega ningún tipo de nutriente, por ende, es totalmente evitable”.
Pero como entre la teoría y la práctica en este ámbito hay mucho trecho, y con ánimo de ser realista, la especialista indica que, si se va a consumir alcohol, “nos preocupemos de tomar agua, para controlar la deshidratación y también para evitar el sobre consumo de bebidas alcohólicas. Ahora, también está la posibilidad de elegir tragos que sean algo menos calóricos, como lo puede ser una copa de vino o un borgoña (vino con frutas)”.
Ahora, si por esos días, tienes pensado participar de asados, la experta indica que “lo mejor es elegir carnes bajas en grasa, como lo puede ser el pollo y preferir su cocción en la parrilla. También hay que intentar evitar agregarles aceite, sal en exceso y mantequilla. Además, se puede preferir acompañarlas de ensaladas, idealmente de hojas verdes, en vez de carbohidratos como puré, papas mayo o arroz”, agrega.
Otra forma de compensar las calorías ingeridas de una forma entretenida, es aprovechar estas fiestas para bailar mucha cueca, ya que se ha visto que la danza nos permite ejercitar todo el cuerpo, quemar calorías, y mantenernos en forma. Esto, junto con sus otros beneficios, como la liberación de endorfinas, transforma bailar en una gran elección a la hora de netear nuestro peso en estos días de festejo.