Dr. Omar Luz Hidalgo
Consejero Regional de Atacama
Presidente Comisión de Salud
En realidad, quiero referirme a la reaparición de un amigo que ya creíamos en vías de extinción. La verdad es que nunca ha estado en ese riesgo, pues su condición ha sido más bien de un estado de mutación y, por cierto, me estoy refiriendo al SARCOV 2 o, tal vez, más conocido como Covid19.
Lo que estamos observando, en la actualidad, es un aumento de la infección por la variante ómicron y sus múltiples mutaciones que las más comunes mencionadas son la ómicron BA.1 y BQ.1, siendo esta última conocida como “perro del infierno”, aunque sus características distan mucho de ser tan complejas como su nombre parece sugerirnos. Lo cierto es que, todas estas últimas variantes aun cuando parecen ser bastante contagiosa, son menos agresivas en términos de complicaciones respiratorias y de otra índole, por lo tanto, es poco probable que se lleguen a copar las hospitalizaciones, como ocurrió en los peores momentos de la pandemia.
Sin embargo, las posibilidades de encontrarnos nuevamente con enfermos que puedan requerir tratamientos complejos y cercanía con la muerte son altas. De allí el interés del Ministerio de Salud de reforzar la campaña de vacunación, especialmente, en aquellos grupos de alto riesgo como son los adultos mayores; los enfermos de patologías crónicas, como diabetes e hipertensión y; aquellos que son inmunocomprometidos, por las razones que fueran.
En el país se ha visto un aumento importante de los enfermos por este virus, -aunque esta semana registró una reducción con respecto a la semana anterior-, igual ha habido 41 personas fallecidas. Sobre estas personas, se podría decir que tal vez algunas de ellas no vacunadas podrían haber evitado este final si hubieran recibido la protección preventiva adecuada.
En nuestra región, ha habido 54 casos registrados en la semana, correspondiendo a un incremento del 22,7% con respecto a la semana anterior. Sin embargo, debe reconocerse que la cantidad de casos debe ser mucho mayor, ya que no todas las personas con sintomatología se realizan el test de antígeno o la PCR, por lo que, hay un enorme sub-diagnóstico.
Por lo tanto, no hay que confiarse y cada persona que tiene sintomatología respiratoria, debiera realizarse el estudio y, por supuesto, si usted pertenece a alguno de los grupos de riesgos mencionados más arriba, por su propia protección y la de su entorno, debe acudir prestamente a los centros de salud para solicitar su vacunación.
El virus, perteneciente a la familia de los coronavirus, llegó para quedarse y eso es algo que debemos tener presente. Lo más probable es que, sigan apareciendo variantes y, como ocurre con la influenza, deberemos seguir vacunándonos tal vez anualmente o, más bien, menos. Serán las autoridades de salud, con sus equipos epidemiológicos, quienes estudiarán las características de los virus, sus variantes y sus comportamientos en el ser humano. Mientras tanto, debemos estar pendientes y dispuestos a tomar las medidas que sean necesarias, para mantenernos sanos y no ser una carga innecesaria y evitable.