23 de enero– De forma unánime la Cámara aprobó, en su último trámite legislativo, el proyecto que establece el derecho al olvido oncológico para materias financieras, transcurridos cinco años desde recibida el alta clínica de remisión de la enfermedad. Bajo este contexto, el diputado por Atacama, Jaime Mulet, aclaró qué significa que se establezca el derecho al olvido en caso de enfermedades oncológicas: “Es muy importante desde el punto de vista legal, ya que no va a poder ser usado (la información del usuario) por entidades financieras, compañías de seguros u otras, el hecho de que una persona padeció cáncer para no otorgarle un crédito o para no acogerse a un seguro o para no entrar a una isapre”, dijo el parlamentario, quien agregó que “se van a eliminar los registros que tienen que ver con esa enfermedad una vez que la enfermedad haya sido remitida y cuando pasen cinco años se establece el derecho al olvido”, dijo el legislador Regionalista Verde.
Mulet agregó que este proyecto, que fue despachado a ley, es muy relevante, porque “hoy día no existe ese derecho y muchas veces las personas que han padecido cáncer que ya están con cáncer remitido, no pueden optar a beneficios financieros”.
Pero el parlamentario fue más allá y explicó que “lo que busca es garantizar que en Chile las personas que han padecido y sobrevivido al cáncer no sufran discriminación financiera una vez superada su enfermedad”, acotó Mulet.
El legislador vallenarino añadió que, bajo un contexto regional, acotó: “Hace menos de una semana hubo una manifestación que le llamaron la revolución de los girasoles, quienes luchan por los derechos de los pacientes oncológicos, y que un conjunto de pacientes demandaron lo mínimo, un tratamiento oncológico, porque no lo reciben oportunamente”, dijo Mulet.
El legislador regionalista verde agregó que “en Atacama estamos luchando por un centro oncológico hace muchos años. Se ha ido avanzando en algunos aspectos muy tenues y, como lo señalé, los pacientes reclamaron a las afueras del hospital regional, porque estaban sin atención, con sus tratamientos interrumpidos o atrasados, porque no había la suficiente atención médica en aquellos tratamientos que se hacen en la propia región, que son muy pocos, la mayoría tiene que emigrar hacia otras regiones o ir a Antofagasta o a la región Metropolitana, a buscar su la mejoría”, cerró Mulet.