Por Ulises Carabantes Ahumada – Ingeniero Civil Industrial – Escritor
Secretario Ejecutivo Corredores Bioceánicos Paso de San Francisco y Paso de Pircas Negras
El pasado sábado 1 de junio Su Excelencia el Presidente de la República don Gabriel Boric desarrolló su cuenta pública en el Congreso Nacional en Valparaíso, la que fue transmitida a todo el país. De acuerdo con lo que publica el sitio web oficial del Gobierno de Chile fueron 61 las medidas anunciadas por el primer mandatario en su intervención frente a todos los chilenos. Dentro de esas medidas me detendré en el análisis de tres:
La primera es la que se publica por parte del Gobierno como la número 24; en la que se anuncia que la capital regional de Atacama, Copiapó, será el próximo año 2025 la primera ciudad de Sudamérica en tener una flota de buses urbanos en un 100% conformada por buses eléctricos. De cumplirse esto, sería un reverdecer laureles para Copiapó, ciudad que, a mediados del siglo XIX, junto a Caldera, tuvo el primer ferrocarril del continente sudamericano. Esperemos que este anuncio se haga efectivo en la fecha que se ha comprometido.
El segundo punto en el cual me detendré es aquel que el Gobierno publica con el número 27; en el que se anunció un proyecto de ley orientado a aumentar el impuesto a la renta, el que se complementa con el anuncio publicado con el número 26; donde se anuncia lo que Gabriel Boric llamó un “Pacto Fiscal” por el “Crecimiento Económico, el Progreso Social y la Responsabilidad Fiscal”. La economía chilena no está en los niveles de rendimiento de hace una década o más, se ha ido paulatinamente castigando el bolsillo de los chilenos, en el segundo gobierno de Michelle Bachelet con el ministro Arenas a la cabeza del equipo económico, situación que trajo como consecuencia menor actividad económica y por consiguiente menor recaudación de la esperada. Y ahora, nuevamente nos notifican que se volverá a sobre cargar tributariamente la economía chilena. Esto no es “Responsabilidad Fiscal”, muy por el contrario, no es más que repetir fracasadas políticas que en vez de llevar al “Progreso Social” como lo define el Gobierno, llevan ineludiblemente a un aumento de la pobreza. Al no estar muy lejos, miremos simplemente la experiencia argentina, donde los gobiernos que pretendían un “Progreso Social”, me refiero a los Gobiernos que terminaron el 10 de diciembre pasado, el último encabezado por Alberto Fernández, a través de impuestos a la renta, impuestos a las exportaciones, impuestos a las importaciones e impuestos, impuestos y más impuestos, sólo lograron que el buscado “Progreso Social” fuera sinónimo de llevar a un cincuenta por ciento de los argentinos a estar bajo la línea de la pobreza, con indignos comedores abastecidos por el Estado donde acude el pueblo argentino a satisfacer la más elemental necesidad de todo ser humano como es comer. Ese es el “Progreso Social” que terminan creando los gobiernos que quieren ser verdaderos Robin Hood, “quitando a los ricos para dar a los pobres”. Una irresponsabilidad mayúscula. El verdadero “Progreso Social” lo encuentran los ciudadanos cuando son poseedores de una fuente laboral en cualquiera de las industrias, es decir, una fuente laboral asociada a producción. Pero esta elemental realidad no es entendida por nuestro actual gobernante ni por sus seguidores, quienes tienen como política oponerse a la generación de trabajo y apuestan por el “Progreso Social” reventando por medio de impuestos a la economía. Pan hoy, hambre mañana. Esperemos que en el Congreso prime la racionalidad y se ponga freno a este nuevo intento pupulista el que nos llevará ineludiblemente a la pobreza, como llevaron en forma irresponsable a un país rico como Argentina, por medio de nefastas e irresponsables políticas. La mejor política pública es el pleno empleo.
El tercer punto al que me referiré de los publicados por el Gobierno como anuncio del Presidente de la República el pasado 1 de junio, es el que aparece signado con el número 18 y que tiene relación con una necesidad país, aumentar el potencial portuario de Chile, donde nuestro país está al debe. Boric anunció el impulso al proyecto llamado “Puerto Exterior San Antonio”, lo que es la ampliación y modernización del puerto de San Antonio, anunciándose también la ampliación del puerto de Valparaíso. ¿Qué dicen de esto los defensores del regionalismo en Atacama?. No obstante lo positivo de este anuncio del Gobierno, éste también es sinónimo de mantener incólume el centralismo, traducido en el eje sudamericano Buenos Aires- Mendoza – Santiago -Valparaíso/San Antonio. Y en nuestra región de Atacama ya han sacado la voz quienes se oponen al desarrollo portuario, aquellos que con hipocresía se dicen regionalistas, falsos profetas de la descentralización, que ya han comenzado a sabotear el futuro de los atacameños buscando bajar de la inversión regional el formidable y ecológico proyecto portuario en Punta Cachos, proyecto denominado CopiaPort E. Este es un proyecto de importancia estratégica para nuestra región, un proyecto que le dará a Atacama un futuro distinto al mono productor minero, importante por cierto, pero Atacama merece más, las futuras generaciones merecen múltiples oportunidades, este proyecto portuario es un proyecto que en definitiva rompe con el centralismo, en este caso un centralismo de nivel continental.
Mis lectores pueden revisar los dos links ubicados debajo de este texto y que están relacionados con esta publicación.
