Juan José Ronsecco, Presidente de Corproa
La minería ha sido un pilar fundamental en la construcción de nuestro país. Desde los tiempos de la colonia, la explotación de recursos minerales ha marcado el rumbo de nuestra economía y sociedad. Hoy en día sigue siendo un motor de desarrollo, generando importantes ingresos para el país y permitiendo la implementación de diversas políticas públicas.
También la minería representa una porción significativa del Producto Interno Bruto (PIB) de Chile. Las exportaciones de minerales son una fuente crucial de ingresos para las arcas nacionales. Además, la actividad minera genera empleos directos e indirectos, contribuyendo al desarrollo de las ciudades y las comunidades locales, fomentando la inversión en infraestructura, como carreteras y puertos, mejorando la conectividad y la calidad de vida de los habitantes.
Los ingresos provenientes de la explotación de minerales también son fuente de innovación, impulsando el desarrollo de nuevas tecnologías y la adopción de mejores prácticas en materia ambiental y social.
En este breve repaso, podemos constatar que la minería es mucho más que una simple actividad extractiva. Es un sector estratégico que ha moldeado la historia, la economía y la sociedad de Chile, las regiones mineras y en particular de Atacama. Su importancia es fundamental para generar riqueza, de la misma forma en que es fundamental que la actividad minera se desarrolle de manera sostenible, minimizando sus impactos ambientales y sociales, tal y como vienen haciendo todos los nuevos proyectos de inversión.
Celebremos juntos a la minería de hoy, la que quiere invertir en desarrollo y bienestar social respetando su entorno y las comunidades locales. Apoyemos la inversión que respeta las reglas y quiere venir al país y la región. Hoy no solo celebramos a una actividad económica, sino que a una parte sustantiva de nuestra historia nacional.