El Salvador, jueves 2 de diciembre de 2021.- Puerto Barquito de Codelco Salvador y la Gobernación Marítima realizaron un simulacro preventivo de derrame de hidrocarburo en la bahía de Chañaral.
La actividad contó con la participación de organismos de emergencia de ambas instituciones, junto a personal de Aduanas y la Junta de Vecinos de Barquito, con el objetivo estar prevenidos y mejor entrenados ante un eventual derrame de hidrocarburos o sustancias peligrosas en el mar, minimizando el daño al medio ambiente y a la comunidad.
En el ejercicio naval se simuló el derrame de hidrocarburo mediante 100 kilos de naranjas, cuyo fruto tiene la particularidad de comportarse en su flotabilidad, de manera similar al fuel oil en el agua, para que luego, dos remolcadores extendieran una manga para la contención del derrame, evitando que el hidrocarburo genere daño a la fauna marina de la zona.
Luis Guerra, ingeniero jefe del puerto Barquito de Codelco Salvador realizó un balance positivo de la actividad y destacó que “este simulacro es muy importante, ya que es central que todos los estamentos involucrados en el trabajo diario del puerto, estemos coordinados en la forma de proceder ante un evento de estas características”. Similar visión tuvo el teniente primero Alejandro León, capitán de Puerto de Chañaral, quien destacó “la importancia que genera la preparación de todos quienes trabajan en el puerto de Barquito, ya que, ante la eventualidad de un incidente, todos deben tener claro y asumidos sus roles”.
Uno de los aspectos relevante de este simulacro, fue la participación de la comunidad local, quien representada en Mirta Burgos, presidente de la Junta de Vecinos de Barquito, “agradeció el actuar y la invitación de Codelco para poder presenciar el ejercicio, ya que con ello, pueden informar a la comunidad sobre la preparación que se debe realizar”.
Perteneciente a Codelco Salvador, el puerto Barquito se encuentra ubicado en la bahía de Chañaral y actualmente se encuentra en un proceso de modernización, que incluye la construcción de un nuevo sistema de carguío conocido como Shiploeader, cuya estructura de 24 metros se extiende como un brazo mecánico que deposita la carga sobre la embarcación, la cual es transportada por correas que tienen una capacidad de 1,8 millones de toneladas al año.