Esta mañana en las dependencias de la corte de apelaciones de Copiapó el alcalde de la comuna, Cristian Tapia Ramos y el honorable concejo municipal se hicieron parte del recurso de protección presentado la semana pasada por el Club Deportes Vallenar, con la finalidad de revertir la decisión de la ANFP que le otorgó por secretaría el ascenso a Melipilla.
En la oportunidad el alcalde Tapia y los concejales, Luis Bocdanic, Luis Valderrama, Robinson Morales, Patricio Neira y Rebeca Torrejón fueron acompañados por el abogado de la corporación municipal José Días quienes presentaron el escrito que argumenta la demanda por vulneración de derechos fundamentales establecidos por la constitución y que fueron arbitrariamente desconocidos por el ente rector del fútbol chileno.
La autoridad comunal indicó además que creemos que es la corte de apelaciones de Copiapó la única que puede hacer justicia y llevar este caso como corresponde, ya que el TAS en una primera instancia acoge nuestra demanda y posteriormente se declara incompetente tras la posición de la ANFP de impugnar a este organismo, por lo que creemos que ahora se podrán escuchar a las partes y resolver con justicia si Vallenar merece ser el equipo ascendido a la primera B.
“Cuando uno escucha al entrenador y máximo accionista de Melipilla preguntándose porque el alcalde, los concejales y los parlamentarios opinan de este tema, yo le quiero decir porque esta institución nos pertenece a todos los vallenarinos y no lo miramos como un negocio, lo miramos como la oportunidad de contar con fútbol profesional, como una ventana para cientos de jóvenes que en vez de estar metidos en las calles, pueden estar haciendo deporte y soñar con ser un profesional del fútbol”.
Finalmente el alcalde de Vallenar hizo un llamado a la ANFP para que de una vez por todas traten a Deportes Vallenar como se merece, reconociendo que se equivocaron tomando decisiones apresuradas en cuatro paredes y desconociendo el triunfo en cancha ganado por Deportes Vallenar y que de manera insólita fue cambiado por el jefe de los árbitros, provocando un daño enorme a toda una ciudad que se vio pisoteada por la ANFP.