Abril, 2022. Santiago, Chile. Uno de los principales beneficios que trajo el plan de vacunación masiva en Chile, fue la disminución significativa del uso de camas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Sin embargo, esto no significó una caída en la demanda, por el contrario, esas mismas unidades están siendo requeridas por personas con otros diagnósticos.
De acuerdo con cifras del Ministerio de Salud, al 13 de abril había un total de 2.169 camas críticas habilitadas en total. De ellas, 379 corresponden a contagios de Sars-CoV2, y 348 se encuentran disponibles. Esto deja un total de 1.442 camas críticas ocupadas por pacientes con patologías no relacionadas al Covid.
A juicio de los especialistas de distintos hospitales, clínicas y centros médicos, este escenario podría explicarse por una razón clave: el retraso en la atención de cuadros y enfermedades que fueron desplazados durante el momento más complejo de la pandemia, ha obligado a los equipos de salud a actuar con rapidez, pero también con un alto estándar en materia de atención de los pacientes.
Nueva era de ultrasonido como herramienta
Una tecnología que podría ayudar a la gestión del tratamiento de estos pacientes es la nueva era de equipos de ultrasonido, que incluye soluciones que hacen más eficiente el diagnóstico, así como también el seguimiento al tratamiento de las personas.
“La tecnología ultrasonido hoy cumple un rol fundamental acompañando las decisiones que toman los profesionales de la salud frente a los pacientes con urgencias coronarias, patología que ocupa un gran número de las camas UCI no vinculadas a Covid-19. Las imágenes no sólo llegan de inmediato, en tiempo real, sino que con altísima definición. Esto permite certeza y eficiencia a la hora de actuar, lo cual es esencial en un contexto de emergencia”, explica Paulo Pontes, director de Ultrasonido para Siemens Healthineers.
Para Nelly Oberg Rivero, especialista clínica y de aplicaciones para Ultrasonido en Siemens Healthineers, “los equipos de ultrasonido de la familia ACUSON, tales como ACUSON Sequoia, ACUSON Juniper y ACUSON Redwood, permiten reducir la distorsión por movimiento o el flash del color en estructuras vasculares, lo cual impacta estrictamente en la eficiencia de los flujos de trabajo, ya que una imagen precisa y de calidad es clave para que el diagnostico sea certero. Esto permite atender más pacientes y ahorrar costos, evitando la repetición de exámenes y reduciendo el número de pruebas adicionales”.
Hoy las innovaciones también han permitido contar con otros equipos de alta tecnología, pero de tamaño más compactos, como es el caso del ACUSON Juniper, que es un 36% más pequeño que otros similares y un 27% más liviano. “La facilidad para mover el equipo y que esté listo para utilizar en cinco segundos permite responder a una de las necesidades que enfrentan varios hospitales: la escasez de espacio”, concluye Oberg.
Además, es importante recalcar que actualmente los equipos poseen tecnologías avanzadas que permiten adelantarse a posibles patologías más graves. Es el caso del estudio hepático, donde se puede evaluar con el ultrasonido los niveles de infiltración grasa, que a largo plazo llevarán al paciente a un posible daño hepático. Tener una herramienta que permita detectar antes una patología como esta, hace que el ultrasonido sea un aliado en la calidad de vida de los pacientes.
“Por otra parte, Siemens Healthineers cuenta con elastografía hepática y un software que entrega el porcentaje de atenuación producto de la infiltración grasa (UDFF) que son herramientas que permiten un diagnóstico previo a un posible daño hepático futuro. Tener una herramienta que logre detectar antes una patología como ésta, hace que el ultrasonido sea clave” concluye la especialista.