En la celebración también renovaron sus votos religiosos
Las religiosas de las congregaciones presentes en Atacama se reunieron este lunes 15 de agosto en la Catedral de Copiapó para celebrar el día de la Vida Consagrada, en la Solemnidad de la Asunción de la Virgen. La misa se celebró al mediodía, y fue presidida por el obispo, Monseñor Ricardo Morales, acompañado de sacerdotes de toda la diócesis.
En la homilía, el obispo agradeció a las religiosas su incansable labor en medio de las comunidades. También habló de la importancia de la mujer en la historia de la salvación. “¡Cuánto tenemos que hacer como Iglesia, en nuestras relaciones, estructuras, liturgia, para responder al justo reclamo de las mujeres, por un rol verdaderamente participativo y deliberativo!; tenemos que ir avanzando en ese reconocimiento”.
Vida religiosa
“Si hay algo que la vida religiosa tiene, es estar en las periferias, con los pobres, los enfermos, los ancianos, los niños, en las tomas”, dijo el obispo, y agregó: “Donde hay un dolor, ahí está la vida consagrada, porque hace carne el cántico de la Virgen, de liberación, que enaltece a los humildes y derriba a los poderosos. Cuando no ha estado con los humildes, ha fallado, y sabemos las perversiones que se han dado”.
Después de la homilía, el obispo obsequió a cada religiosa un cirio y las invitó a encenderlo cada vez que celebren la liturgia, visiten a algún enfermo, hagan oración. Y luego, las religiosas y religiosos renovaron sus votos de pobreza, castidad y obediencia. Este rito finalizó con un saludo del obispo a cada una de ellas y ellos.