Los partidos políticos que formamos parte del Gobierno venimos a reivindicar la lucha de años y la convocatoria de la Central Unitaria de Trabajadores para este 1 de Mayo en Copiapó.
Cómo base política de un Gobierno transformador, declaramos nuestro total apoyo a las justas demandas de las y los trabajadores de Chile, porque compartimos el sueño de un país mejor, más justo y democrático. Pero también porque esas demandas, en cierta medida, inspiraron la construcción del programa de gobierno y están vinculadas estrechamente con nuestro trabajo político permanente.
Es por ello que apoyamos profundamente las diferentes iniciativas impulsadas por el Gobierno del Presidente Gabriel Boric en la línea de fortalecer mejores condiciones salariales, en horas, mejoras en la seguridad y salud de millones de mujeres y hombres que conforman la fuerza laboral y productiva de nuestro país, en momentos en que la extrema derecha busca retrotraer diversos logros sociales conquistados por la clase trabajadora durante los gobiernos democráticos.
El aumento del sueldo mínimo y la disminución de la de jornada laboral a 40 horas son grandes avances que viene a mejorar las condiciones de vida de las familias chilenas, que han enfrentado distintas adversidades durante los últimos años y que hoy fundamentalmente demandan seguridad, en sus diversas dimensiones.
Del mismo modo, queremos destacar el anuncio realizado por el Presidente Boric respecto de la Estrategia Nacional del Litio que busca aumentar las riquezas para el país, poniendo al Estado presente en todo el ciclo productivo, desde la exploración hasta la agregación de valor, esto a través de la creación de la Empresa Nacional del Litio y del Instituto Tecnológico de Investigación Pública en Litio y Salares.
En el litio tenemos una nueva posibilidad histórica que no podemos desaprovechar, en tanto representa un mejor futuro para las familias chilenas, el cambio hacia una economía verde y la opción de un modelo de desarrollo distinto.
Por último queremos señalar que tenemos la convicción desde nuestra experiencia histórica, que sólo la unidad entre las fuerzas de cambio, los trabajadores y trabajadoras y el mundo social harán posible seguir avanzando en las transformaciones que el país requiere y que la derecha rechaza, amparada en la actual constitución.
