La actividad, que en la región es desarrollada por la organización Simón de Cirene, busca entregarles apoyo a las emprendedoras locales en la profesionalización de sus negocios.A casi dos meses del lanzamiento de la Escuela Mujer Emprende -iniciativa del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género Atacama y ejecutado por la organización Simón de Cirene-, más de 80 mujeres de todo el territorio regional siguen comprometiéndose en su formación, con el objetivo de fortalecer sus emprendimientos y aumentar su independencia y reactivación económica.
Durante este tiempo, las mujeres participantes han recibido asesorías -virtuales y presenciales- con contenidos didácticos y pertinentes dirigidos a la profesionalización de sus negocios, a través de herramientas técnicas y de gestión, promoviendo en ellas estrategias que permitan fortalecer sus competencias y habilidades, potenciando así el crecimiento, viabilidad y sostenibilidad de sus negocios.
“Para nosotras como SernamEG, el poder estar apoyando nuevamente a un alto número de mujeres en la región gracias a la Escuela, es fundamental para nuestro quehacer referido a potenciar su autonomía económica y su empoderamiento. Desde hace dos meses que hemos visto compromiso y disposición de parte de ellas -algunas viajan a Copiapó desde otras localidades para asistir a las tutorías presenciales- lo que nos demuestra que hay interés y ganas de aprender. Además, el espacio de sororidad que se arma en estas instancias les ayuda a generar redes de asociatividad que sin duda les servirán en el futuro”, comenta al respecto Marcela Moraga Ledesma, directora regional (s) de SernamEG Atacama.
Por su parte, Camila Matus Sáez, Jefa de Proyectos de Simón de Cirene y encargada de esta iniciativa a nivel regional, señala que “como ejecutores buscamos motivar a las emprendedoras a poner en práctica lo que aprenden cada día y lo hacemos siempre desde el afecto para conseguir los efectos deseados. El rol de la tutora y el apoyo de María Victoria Rojas -contraparte de SernamEG- es fundamental para guiar a las mujeres a mejorar sus prácticas, para que todo lo aprendido sea puesto en práctica con sus negocios. En estos dos meses las mujeres se han vinculado y han entendido que no están solas, que el camino del emprendimiento no tiene por qué ser en solitario. Esperamos seguir con buenos resultados para celebrar juntas en el Encuentro Regional la materialización del esfuerzo durante este tiempo con un certificado que esperamos, les abran más caminos”.
Emprendiendo desde El Salvador
Hasta la fecha, las mujeres participantes han participado de talleres presenciales – desarrolladas en la Universidad de Atacama- a través de módulos donde han reforzado conocimientos sobre perspectiva de género, pertinencia territorial, generación de redes y asociatividad y herramientas para construir un modelo de negocios adecuado; contenidos que responden a las necesidades actuales que tienen las emprendedoras a la hora de iniciar y formalizar sus negocios.
Desde El Salvador, la artesana muñequera y emprendedora Randina Gajardo Riffo, explica la importancia que tiene en su formación continua el participar de la Escuela Mujer Emprende y señala que “la experiencia ha sido súper power. Tengo el privilegio de ser la única del campamento participando de esta iniciativa y he tenido la oportunidad de conocer a mujeres de la región que están en la misma onda que yo, entonces he aprendido harto. En general, la Escuela es muy autodidacta, pero lo que más me gusta es que las chiquillas están en constante comunicación con nosotras, todos los días nos aleonan, nos echan ganas y nos empoderan. Los talleres presenciales son maravillosos, la verdad es que se ha conformado un grupo de mujeres con una energía tan grande, que te dan ganas de seguir emprendiendo”, finalizó.
La Escuela Mujer Emprende, cerrará este 2023 con un encuentro regional, como una forma de favorecer la entrada a otros espacios que apunten a generar nuevos canales de comercialización y que garantice un desarrollo
